La mayoría de los parados desconocen, y por lo visto, periodistas y sindicalistas también, que las personas en situación de paro o desempleo, se quedarán sin derecho a la prestación sanitaria pública y gratuita una vez que pasen 90 días, o lo que es lo mismo, 3 meses desde el cobro de la última prestación o fecha de Baja de la Seguridad Social.
Pasada esa fecha, perderán el derecho a ser atendidos gratuitamente salvo que tramiten la tarjeta sanitaria por la vía “personas sin recursos económicos suficientes” o se adhieran como beneficiario a algún familiar que cotice a la Seguridad Social cumpliendo los requisitos para ello requeridos.
Esto es lo que dice el Real Decreto 1088/89 que sigue en vigor hoy en día.
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Puedes disfrazarlo como quieras, pero al final el único culpable de tirar una piedra es el que la tira.