#9 insisto en que tu análisis es sumamente cuñado. Una cosa es el derecho a solicitar una ayuda (un derecho reconocido en la CE art. 29) y otra cosa es que una ideología retrógrada y facha considere que éstas sean algo que no se deberían conceder. Quizás para mantener los privilegios de una gente que lo único que saben hacer dia si y día también es amargar la vida a los demás en base a señalar (la corrupción) como muy bien (por cierto) saben ejercer en primera persona. (Léase la pareja de Ayuso, la hermana del Sr. Feijóo, el hermano de la Ayuso, el Sr. Mazón, el Sr. Montoro, etc..etc..etc..)
Ah...¿y saben por que la empresa tenía y tiene domicilio social en las Islas Canarias? Por el tema del IGIC. De esta forma los receptores del Kit Digital no tenían que pagar el IVA peninsular pero si el insular correspondiente al bono concedido por Red.es.
Lo de Mazón es absolutamente impresentable. De su vida personal que puede hacer lo que quiera y a nadie le importa, sin lugar a ningún género de dudas. Pero esa terquedad por su parte, de no querer reconocer lo obvio y sobretodo su IRRESPONSABILIDAD que ha supuesto de forma directa e indirecta la vida de 239 personas.
Francamente...si fuera otro tipo de persona con una mente mucho más del S.XXI estoy seguro que la acción institucional hubiera sido de otra manera o forma.
Tanta terquedad por no querer reconocer...al final arrastra al dolor, rabia y sufrimiento de mucha gente.
Muchos padres de los hijos fachas que pululan por la Península Ibérica deberían recordar a sus vástagos en que tipo de condiciones crecieron, vivieron, estudiaron y fueron explotados.
#14 En cierta ocasión se encontraron un burro y un tigre
El burro le dijo al tigre:
– «El pasto es azul».
El tigre respondió:
– «No, el pasto es verde».
La discusión se calentó, y los dos decidieron someterlo a un arbitraje, y para ello concurrieron ante el león, el Rey de la Selva.
Ya antes de llegar al claro del bosque, donde el león estaba sentado en su trono, el burro empezó a gritar:
– «Su Alteza, ¿es cierto que el pasto es azul?».
El león respondió:
– «Cierto, el pasto es azul».
El burro se apresuró y continuó:
– «El tigre no está de acuerdo conmigo y me contradice y molesta, por favor, castígalo».
El rey entonces declaró:
– «El tigre será castigado con 5 años de silencio».
El burro saltó alegremente y siguió su camino, contento y repitiendo:
– “El pasto es azul”…
El tigre aceptó su castigo, pero antes le preguntó al león:
– «Su Majestad, ¿por qué me ha castigado?, después de todo, el pasto es verde».
El león respondió:
– «De hecho, el pasto es verde».
El tigre preguntó:
– «Entonces, ¿por qué me castigas?».
El león respondió:
– «Eso no tiene nada que ver con la pregunta de si el pasto es azul o verde. El castigo se debe a que no es posible que una criatura valiente e inteligente como tú pierda tiempo discutiendo con un burro, y encima venga a molestarme a mí con esa pregunta».
–FIN–