Si dentro de un tiempo los gobernantes de turno deciden que ya no son necesarias esas provisiones contabilizadas, se sacan y entonces generan beneficios. Hace pocos días en el Cinco Días se decía que el Banco Gallego tenía 200 millones de euros en créditos fiscales. Es decir, en exceso de provisiones. Ahora despiden a miles de trabajadores y cierran oficinas, próximamente abrirán nuevamente oficinas y contratarán personal por 4 perras y muchas horas de trabajo. Eso si, seguirán sin invertir un céntimo en formación. Todos a vender como sea y lo que sea. Esta es la extrategía y es lo que veremos por desgracia.
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