Desde la barra del bar, con el carajillo mañanero y palillo en boca.
Alguien ha ofrecido su tiempo y conocimientos a cambio de nada con una propuesta para mejorar su ciudad y ahorrar dinero. En este caso es sobre transporte, pero podría ser en el terreno que fuera.
Creo que lo mínimo que deberían hacer los políticos responsables, a no ser que sea una absoluta locura de proyecto, sería estudiarlo y dar una respuesta razonada a esa propuesta. Si, por lo que fuera, es inviable, lo suyo sería dar las gracias por la aportación a la ciudad y su implicación para hacerla mejor.
Entiendo lo que dice #5 de los funcionarios especializados, pero las propuestas ciudadanas primero pasan por el filtro político. Si los políticos no pasan esas propuestas a los técnicos, estos no puede pronunciarse.
Tampoco perdamos de vista que tal cantidad de millones dan para muchos sobres, cosa que no daría una propuesta que rebaje sustancialmente ese presupuesto.
Si multaran a todos los que van por el carril central o izquierdo y a los que hacen las rotondas como si fuera la curva del Raidillon o la Rascasse nos daría para pagar la deuda externa del país.
Takaichi, ultraconservadora, devota de la figura de Margaret Thatcher, crítica acérrima de China y abanderada de la modificación constitucional para conceder al Ejército nipón más capacidades ofensivas.
El péndulo de la historia del mundo está volviendo a 1933.
Es gracioso, porque preguntas a una IA por los viajes de Ayuso y pides que te lo muestre en kilómetros y nos devuelve esto:
El total acumulado de estos viajes, sumando las distancias redondas, es de aproximadamente 169.380 km. Esto equivale a más de 4 vueltas completas alrededor de la Tierra (circunferencia terrestre ≈ 40.075 km).
No está mal para un presidenta de comunidad, de los que tenemos 17, y presidente del gobierno sólo uno.
Puede que fueran narcos, puede que no, pero aun en el caso de que lo fueran lo que haría un estado democrático sería capturarlos y ponerlos delante de un juez para determinarlo, no asesinarlos en medio del mar.
Estados Unidos es la definición del gigante con los pies de barro. Al más mínimo revés, desastre natural o complicación, el país se rompe por las costuras. Es el ejemplo del vivir, casi literalmente, al día, sin un apoyo gubernamental, prácticamente sin red social ni colchón familiar.
La quintaesencia del individualismo que algunos extremocentristas nos quieren importar y vendérnoslo como si fuera el paraíso en la Tierra, el culmen de la libertad y el Nirvana de la prosperidad.
Dos toneladas, estos son profesionales, no como los pringaos del Juan Sebastián Elcano con apenas 130 kilos.
#3 Más que como lo hicieron (imagino que dos toneladas pueden colarse como unos palets de comida o bebida, bajan al depósito y ahí se quedan guardados por los cómplices hasta llegar al destino), son los santos cojones de utilizar un barco de guerra para eso.
Mucha gente se ha jugado su carrera militar, y la cárcel, por esto.