La entradilla representa la clásica infame literatura del panfleto, es algo que no varía ni en unos ni en otros, y la fuente tampoco da muchas esperanzas.
#33 Es evidente que si no las conoce difícilmente va a nombrarlas. Para ello hay que tener un poco de conocimiento de la generación del realismo madrileño, aunque Laffón era andaluza, y según parece él no ha estudiado arte de un forma oficial. ¿Las conocías tú acaso?
La verdad es que no sé como le dieron premio en San Sebastián porque cinematográficamente es igual que cualquier retransmisión de toros en televisión. Lo único que se echa en falta es la voz de Manolo Molés.
#43 No, no has leído bien. La crítica no se refiere a los restaurantes con estrella Michelin, sino a aquellos restaurantes que se han puesto de moda o por chefs que pasaron una temporada al lado de los grandes de verdad: "... El mito cejijunto por excelencia de los noventa, eso del pasar hambre en las mesas de alta cocina, que nunca fue verdad, se está haciendo realidad hoy en la gama media-alta urbana."
Lo que critica en el artículo no son los restaurantes de alta cocina de verdad, sino de aquellos montados por listos como los que pululan por aquí que nunca han estado en uno y se creen que allí te ponen solo un menú de primero, segundo y postre en platos enormes y raciones escasas. Aquí mismamente son 15 platos. A ver si sales con hambre: barrorestaurante.es/alimentarse/ 15 platos por 150€ me parece una ganga