#8 Yo con el tiempo me doy cuenta de que Prometheus estaba bastante bien. Tiene grandes errores de ejecución (agujeros de guión, personajes que de una escena a otra cambian de carácter, decisiones estúpidas...) pero me gustaron las ideas base. Lo primero se puede perdonar si lo segundo es sólido.
Lo de que el xenomorfo sea un líquido, un gas, que puede convertirse en serpiente o poseer a una persona que a su vez puede dejar preñada a otra de un calamar gigante que a su vez ya sí pare a algo parecido al xenomorfo bípedo... en su día me pareció efectismo puro pero tiene sentido. El xenomorfo es eso, raro y alienígena en todo el sentido de la palabra, inclasificable y anormal, ajeno nuestra realidad y contrario a cómo entendemos que funciona la naturaleza.
#8 Los etarras son los que van encapuchados. Los otros dos son Mertxe Aizpurua y Martxelo Otamendi, directores de Gara y Egunkaria, que les están entrevistando.
Segundo que ha habido expresiones de arrepentimiento, del colectivo de presos e individuales. Otra cosa es que Covite los considere insuficientes o insinceros. Pero existen.
Tercero, el “no se puede estar con la izquierda abertzale y estar arrepentido” ya va más allá de las coartadas jurídicas tras las que se escuda esta señora. Es obvio que busca otra cosa.
De las pocas cosas sensatas que hizo Trump en su primera legislatura fue salir de Afganistán. Obviamente tamaño error de carácter tiene que ser enmendado.
¿Alguien me puede explicar por qué la misma gestión de las políticas de inmigración es racista si la lleva el gobierno catalán y no-racista si la lleva el central?
#1#2 Tengo curiosidad de cómo va a evolucionar este tema con la IA. Estoy viendo un futuro no muy lejano donde todo (pelis, libros, televisión, streamings…) se traduzca en tiempo real a tu lengua local. Que la homogeneización del lenguaje de repente se revierta 180 grados.
Añadiría la tesis de José Soto Chica (El águila y los cuervos) sobre cómo el imperio romano se fue al traste cuando la élite “milmillonaria” empezó a rebelarse contra los impuestos y plantearse para qué necesitaban al Estado.
«Esta aristocracia de millonarios entiende que no es necesario el Estado. Su influencia y poder, están convencidos, garantizan su bienestar. ¿Para qué pagar impuestos a fin de respaldar a la corte imperial y el ejército si puedo pagar a un bárbaro local para que me mantenga en la cúspide social?, reflexionan».
El error que cometen es sustancial y Soto Chica lo subraya: «No se daban cuenta de que las estructuras de un Estado son más complejas que eso. Fue un acto de soberbia por parte de ellos, porque en última instancia el dinero no te protege; quien tiene la fuerza es quien decide. El senador poseía los caudales, pero la espada la esgrimía el bárbaro».
La inmigración es un riesgo para la cohesión social y para la lengua catalana. Esto es un hecho, no un juicio de valores. Por algo existen las políticas de inmigración.
Normal, el discurso anti inmigración está de moda en toda Europa y si en España no está cuajando más es porque el partido al que más se identifica con esto da vergüenza ajena.
Bueno, es un conflicto complejo con sus claroscuros que no se puede circunscribir a la (enésima) imagen de una niña enterrada en escombros. Cualquier medida precipitada cuando apenas llevamos dos años de niños muertos sería una victoria de los terroristas, pero quedamos a la expectativa de la evolución de los acontecimientos porque así de firmes somos con la defensa de los DDHH.
Atentamente, unos mierdas sin autoridad moral ninguna.
Es triste pero con los años he dejado de achacar estas cosas no tanto a corrupción y sobornos como a la inutilidad y vagancia de jueces y funcionarios.
Algo que la serie recoge y subvierte cuando Jessica responde que quizá, quien le acusa de “ser demasiado”, simplemente “no es suficiente”.
No he visto esta serie pero Jessica ya me parece imbécil.