Como ha ocurrido ya más de una vez, el último programa de Salvados ha generado mucho debate en la red. El tema tratado esta semana ha sido las dificultades para encontrar trabajo de los parados de más cincuenta años. No obstante, la polémica no ha surgido por este tema por desgracia tan de actualidad, sino cuando Jordi Évole pone en contacto un parado de más de cincuenta años que ha sido despedido junto a otros quince compañeros por causas objetivas y por tanto con una indemnitzacióó de veinte días para año trabajado con un máximo de un año en lugar de los cuarenta de antes gracias a la reforma laboral aprobada por el gobierno de Rajoy, siendo sustituidos por trabajadores temporales, y que gracias a que es muy difícil que encuentran trabajo y que por la reforma del sistema de pensiones aprobada por el gobierno de Zapatero estará en el paro hasta los sesenta y siete años (y por tanto cobrando una pensión menor ya que el importe de la pensión se calcula en base a los últimos quince años cotizados) con dos responsables de políticas laborales del PP y del PSOE, en concreto Carmen Álvarez-Arenas del PP y Concha Gutiérrez del PSOE.
Estas dos señoras, en lugar de dialogar o dar alguna explicación al trabajador despedido se dedican a pelearse interrumpiéndose una a la otra y como máximo argumento utilizan el clásico "y tú más" que tan de moda está en los patios de nuestras escuelas. Esto que podría no ser más que una anécdota ha generado tanto indignación en las redes sociales porque es un síntoma que demuestra que nuestro sistema político no funciona. Estas dos mujeres, totalmente desconocidas para el gran público, se supone que deben trabajar por nuestro beneficio, pero cuando tienen la oportunidad de mostrarnos su labor se limitan a discutir como niñas.
El problema no son ellas, lo que da miedo es que dos personas como ellas han podido llegar al congreso. La partitocracia que padecemos hace que la inmensa mayoría de los trescientos cincuenta diputados del… » ver todo el comentario
Estas dos señoras, en lugar de dialogar o dar alguna explicación al trabajador despedido se dedican a pelearse interrumpiéndose una a la otra y como máximo argumento utilizan el clásico "y tú más" que tan de moda está en los patios de nuestras escuelas. Esto que podría no ser más que una anécdota ha generado tanto indignación en las redes sociales porque es un síntoma que demuestra que nuestro sistema político no funciona. Estas dos mujeres, totalmente desconocidas para el gran público, se supone que deben trabajar por nuestro beneficio, pero cuando tienen la oportunidad de mostrarnos su labor se limitan a discutir como niñas.
El problema no son ellas, lo que da miedo es que dos personas como ellas han podido llegar al congreso. La partitocracia que padecemos hace que la inmensa mayoría de los trescientos cincuenta diputados del… » ver todo el comentario