Este fin de semana compré, en un rastro callejero, un viejo ordenador portátil. Supuse que, como viene siendo habitual, encontraría algo de información privada, alguna foto, algún documento, lo típico.
Pues esta vez no, lo que había es una cantidad inmensa de información, tanto personal como empresarial, aproximadamente 15 Gb en total. Fotos personales en abundancia, albaranes y facturas de una empresa, números de cuenta, datos de contacto de todo tipo y documentación empresarial muy detallada. Lo único que salva un poco el desastre es que el grueso de la información es del periodo 2004~2007, y está básicamente obsoleta. Aun así, esta información podría haber sido peligrosa si hubiera caído en manos equivocadas. Con los datos existentes y algo de paciencia se podría haber montado una suplantación de identidad, con su consecuente estafa.
Por supuesto, tras dar un vistazo para calibrar el desastre, ya está todo borrado, y en breve el disco duro "sufrirá" un borrado intensivo, por lo que será imposible recuperar nada.
¡Borrad la información de vuestros dispositivos viejos antes de tirarlos!
Para los frikis de la retroinformática: Compaq Armada 900, Athlon XP Mobile 2000+ (1.66 Ghz), 256 Mb RAM DDR266, Ati Mobility Radeon U1. 5 Euros, sin saber si funcionaba, y sin fuente de alimentación. La pantalla no funciona, pero con una externa va todo perfecto.
Analizo 75 envíos recientes de Delay (3 primeras páginas de su historial). Se observa un núcleo duro de usuarios que le vota a menudo, temprano y con buen karma acumulado, lo que actúa como palanca de tracción en las primeras fases. Cada cual que saque sus conclusiones.
Motivación: Hay que tener en cuenta que el algoritmo de promote tiene en cuenta también la cantidad de noticias, el tiempo entre ellas, etc, además de la "cotización" del propio karma: es decir, cuanto más noticias llegan a portada a partir de votos "coordinados", más difícil es que lleguen a portada envíos por parte de usuarios que no tienen ese tipo de relaciones.
Métricas clave:
Quiénes más veces le votan en positivo. Marca la asiduidad.
Porcentaje de historias de Delay que vota cada usuario. Coberturas del 60-85%+ huelen a seguimiento constante.
Cuanto más alto, más temprano suele caer su voto en cada historia.
Traducción a portada: cuando los votantes llegan antes y pesan (karma), el envío despega con más facilidad.
Esquina superior derecha = usuarios que casi siempre están y, además, llegan pronto. Esos son los que empujan de verdad.
Lectura (clave): aquí están los que más empuje real aportan.
El karma deja de subir en portada, por lo que lo que ves en esta gráfica es exactamente lo que más influye antes del salto.
Dentro del propio top20, ¿con cuántos coincide muchísimo cada uno?
Se aprecia un núcleo que va en bloque a muchas historias.
Zonas claras = muchas coincidencias.
La esquina superior izquierda revela el subgrupo que prácticamente camina junto.
¿Coordinación? ¿Afinidad? Que cada uno saque sus propias conclusiones.
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En estas 75 historias, la tracción final se explica muy bien por lo que pasa al principio:
En román paladino: llega pronto, pesa mucho y el envío sube.
El núcleo duro destaca justo en eso: alta cobertura, tempraneidad y buen karma.
Y enlazo con la motivación que indiqué al principio:
Además, hay que tener en cuenta que el algoritmo de promote tiene en cuenta también la cantidad de noticias, el tiempo entre ellas, etc, además de la "cotización" del propio karma: es decir, cuanto más noticias llegan a portada a partir de votos "coordinados", más difícil es que lleguen a portada envíos por parte de usuarios que no tienen ese tipo de relaciones.
En base a los casi 300 comentarios en relación a las propuestas de cambio en relación al karma os muestro un resumen de las más razonables así como la posibilidad de abordarlas.
Límites diarios de envíos por usuario
3-5 noticias/día es la cifra que más se repite.
Se sugiere que el límite sea dinámico: cuanta menor «entropía» (diversidad de medios/temas) tenga el usuario, menos envíos le permitir el sistema.
Buena idea. Estudiamos la implementación.
Desacoplar visibilidad del autor
Ocultar el nick del enviador hasta que la noticia salga a portada (así se corta parte del voto «por simpatía o por odio» y se dificulta la detección de clones).
Podemos testearlo como prueba.
Re-ponderar el karma: un voto = un punto
Que el peso de los meneos (positivos y negativos) sea idéntico para todos los usuarios, independientemente de su karma acumulado.
De esta forma 4-5 cuentas «gordas» no pueden lanzar o hundir una noticia en minutos.
Es un cambio demasiado profundo. Lo descartamos de momento.
Reducir el impacto del voto negativo
Que los negativos resten menos del 50 % de lo que suma un positivo.
O bien separar «no me gusta» (sin karma) de «spam/bulo» (sí resta karma).
Ya se planteó a la comunidad y se decidió no tocar el tema de los negativos. Podemos discutirlo de nuevo en el futuro.
Karma «temático» y penalización a la política saturada
Dar menos karma por noticias etiquetadas «política» y más por ciencia, tecnología, cultura, etc.
Incluso crear subs propios de política y permitir que cada lector excluya categorías de su portada personal.
Eso ya está implementado y no incentiva el uso/voto masivo. Hay que asumir que la política interesa a más gente.
Antibots / anticlon sencillos
Captcha en el registro y en el envío de nuevas noticias.
Karma mínimo (y cuenta antigua) para comentar o votar: 30 días de «nevera».
Que los votos no cuenten si en las últimas 2-6 semanas los dos usuarios se han votado mutuamente (detector de «camarillas»).
El antibots se implementó con Cloudflare y va bien. La «nevera» va en perjuicio de los nuevos usuarios. Lo descartamos.
Límite de noticias por medio y por temática
Máximo de 2-3 portadas diarias por dominio para evitar que un periódico monopolice la página.
Control de duplicados: si la URL o el título ya están en cola, bloquear el envío.
Lo acabamos de implementar. A ver cómo funciona.
Incentivar comentario y diversidad
Premiar con algo de karma extra las noticias que generen debate (muchos comentarios) o que provengan de medios pequeños.
Bonificar a usuarios cuya actividad abarque varias categorías (alto «índice de Shannon»).
Buena idea. Estudiamos como implementarlo.
Transparencia y revertibilidad
Publicar la fórmula actual del karma antes de cambiarla.
Que cualquier modificación se pueda deshacer con la misma facilidad si tras un mes los resultados empeoran.
Acabamos de publicar en el blog el código del Promote. Transparencia total
blog.meneame.net/2025/09/15/algoritmo-promote/
Ayer no se canceló solo una etapa ciclista. Se canceló la idea de que el deporte puede servir como anestesia colectiva mientras en Gaza continúa un genocidio. Madrid se convirtió en epicentro de una revuelta ética: miles de personas atravesaron vallas, ocuparon calles y paralizaron un evento televisado en todo el mundo. Frente a ese mensaje de solidaridad, la derecha política reaccionó como acostumbra: culpando al Gobierno, acusando de violencia y minimizando la protesta.
Alberto Núñez Feijóo, incapaz de leer el signo de los tiempos, habló de “ridículo internacional televisado”. El líder del PP no entendió que lo que se televisó no fue un despropósito, sino un pueblo diciendo basta. Ridículo sería mirar hacia otro lado mientras Israel bombardea hospitales, impone hambre y ejecuta castigos colectivos. Feijóo prefiere centrar el foco en Sánchez, porque reconocer que la ciudadanía ha tomado las calles con legitimidad supondría aceptar que la política institucional llega tarde, cobarde y muda.
Isabel Díaz Ayuso no se quedó atrás. Redujo la protesta a “kale borroka alentada por Sánchez”, insistiendo en su retórica de miedo y caricaturizando a manifestantes que, lejos de ser violentos, fueron capaces de detener un espectáculo blindado con 2.300 agentes.
Ese 14 de septiembre no fue una anécdota. Fue una grieta en el guion oficial.
El alcalde Almeida habló de “violencia pura y dura” y se lamentó de haber gastado 350.000 euros municipales en un final televisado que se convirtió en derrota política. Hasta Ortega Smith se sumó, acusando al presidente del Gobierno de “alentar” disturbios. La derecha, en bloque, escogió el mismo guion: negar la causa, sobredimensionar la forma, invisibilizar el fondo.
Lo grave no es que no comprendan la magnitud del gesto popular. Lo grave es que se alinean con el relato que convierte en problema lo que es ejemplo democrático: que la sociedad civil pueda frenar una operación de blanqueo mientras en Gaza se asesina impunemente.
En contraste, el pueblo entendió el alcance histórico del momento. El Gobierno cifró en 100.000 personas las que salieron a la calle y subrayó que la inmensa mayoría lo hizo pacíficamente. El delegado Francisco Martín habló de un “mensaje inmenso de solidaridad”. Incluso con cargas policiales, gases y 22 agentes heridos, lo relevante no fue el choque, sino que la ciudadanía se impuso a un dispositivo descomunal.
No entendieron que la ciudadanía no se levantó contra un evento deportivo, sino contra el intento de usarlo como cortina de humo.
La protesta consiguió algo insólito: romper en directo la lógica de “pan y circo” que domina los grandes eventos deportivos. En vez de un final de fiesta con patrocinadores, hubo un corte abrupto que envió un mensaje más nítido que cualquier pancarta: no hay espectáculo posible mientras mueren niñas y niños bajo bombas israelíes.
El discurso de la derecha, ridículo, violencia, kale borroka, revela un divorcio radical con la calle. No entendieron que la ciudadanía no se levantó contra un evento deportivo, sino contra el intento de usarlo como cortina de humo. En su ceguera, confirmaron lo que se niegan a admitir: que la política real ya no se juega en sus mítines ni en sus comunicados, sino en la capacidad de la gente de torcer la agenda.
Ese 14 de septiembre no fue una anécdota. Fue una grieta en el guion oficial. Fue el recordatorio de que, a pesar de la propaganda, Palestina no está sola y la complicidad tiene un límite.
A estas alturas a nadie se le escapa que Israel no tiene muchos miramientos a la hora de asesinar miles de niños gazatíes. Aquí vengo a aportar unas pinceladas que muestran que hay un cierto patrón de secuestradores, abusadores infantiles y pederastas que buscan refugio en Israel.
Ivonne Gutiérrez
Jueza chilena de menores acusada de formar parte de una red de secuestro y venta de niños durante la dictadura de Pinochet. Se le imputan tres cargos: asociación ilícita, sustracción de menores y prevaricación dolosa a través de procesos de adopciones irregulares entre 1970 y 1990. Huyó a Israel en 1983 y cambió su nombre por Ivonne Bronfman. Después de una larga batalla legal, la justicia chilena solicitó la extradición a Israel en junio. Israel no ha contestado ni tramitado dicha solicitud hasta el momento.
Malka Leifer
Directora de la escuela ultraortodoxa Adass Israel en Melbourne (Australia), acusada de abuso sexual de menores. Huyó a Israel en 2008 cuando comenzaron las acusaciones. Ese mismo año se solicitó la extradición. Israel no accedió a su extradición hasta 13 años después.
Gershon Krancze
Rabino de Brooklyn. Huyó a Israel en 2010, cuando comenzaron las investigaciones por abuso sexual a sus tres hijas. Se solicitó su extradición y no fue extraditado hasta 11 años después.
Nachman Helbrans
Líder de la secta ultraortodoxa Lev Tahor. Está acusado en EEUU desde 2023 por conspiración para cometer tráfico sexual infantil por su papel en la organización de matrimonios forzados con niñas menores de edad dentro de la secta. Huyó a Israel, donde permanece en libertad vigilada en un asentamiento ilegal de Cisjordania.
Shimon Yisrael Rosenstein
Un educador religioso de Nueva Jersey fue acusado de posesión y distribución de pornografía infantil. Huyó a Israel justo antes de que se presentaran cargos formales en su contra en 2019. Estados Unidos solicitó su extradición. A día de hoy sigue sin ser extraditado.
Yisrael Meir Shwekey
Maestro de una escuela judía ortodoxa en Brooklyn, fue acusado de abuso sexual y agresión física repetida contra un niño de 8 años. Shwekey huyó a Israel antes de que se presentaran los cargos en 2021. A día de hoy sigue sin ser extraditado.
Hay muchísimos más casos. Amparándose en la Ley de Retorno de Israel de cualquier judío y apelando al antisemitismo y persecución religiosa, muchos criminales consiguen dilatar, cuando no evadir, la extradición a los países de origen. Israel se tiene que hacer mirar muchas cosas. Otro día hablamos de lo del Mosad y Epstein.
Los gerifaltes que nos han colocado,
no están a nuestra altura, no están a la altura de las circunstancias y,...
ni de lejos están, a la altura de la humanidad:
o no se enteran o no se quieren enterar de qué está en juego.
Siguen pasándose la pelota de uno a otro,
Unos llenándose, después de dos años, la boca de la palabra "genocidio",
para después nada,
y otros negándolo, justificándolo, minimizándolo o defendiendo al verdugo.
Se creen que esto va de ellos, que siguen siendo el foco,
que su papel se resume a seguir ostentando poder, algo de control y dinero...
Y, una vez más, la mayoría de medios, siguen acercándoles los micrófonos y cámaras a las personas equivocadas,
a los deportistas de élite, a los políticos de siempre, a los famosillos de turno,
tocando, de vez en cuando, ahora, de perfil el genocidio con algo más de importancia
que cuando solo era la "guerra israel-hamas"...
Y es, una vez más, el pueblo el que tiene que tomar las riendas, el que tiene que partirse la cara,
el que tiene que mostrar su enfado y gritar, sin micrófonos, hasta quedarse sin voz,
solo para exigir que se cumpla el más mínimo derecho internacional,
las resoluciones de la ONU, que se rompan relaciones con un estado genocida.
Algo que no tendría ni que ser votado ni aprobado, que tendría que ser automático,
al igual que no se vota para decidir si un asesino va o no a la cárcel.
Que no intenten convertir en algo opinable o una muestra de valentía
romper el comercio armamentístico con unos criminales,
a no ser que en realidad no gobiernen en temas importantes, y entonces estamos hablando de otra cosa.
Ahora mismo una flotilla de 20 embarcaciones está marcando un hito histórico:
están enfrentándose a pecho descubierto al 4º ejército más poderoso del mundo,
apoyado por el primero.
Se enfrentan a unos asesinos en serie endiosados y psicópatas,
que han amenazado directamente y acusado de terroristas
y, ni aún así, nuestro gobierno es capaz de protegerlos con nuestro ejército,
supuestamente de defensa.
Y ni aún así los medios se niegan a darle la cobertura y y seguimiento constante que merecen.
¿Qué otro uso puede haber más importante y loable que este?
Cada vez más, se fuerza a que se rompa este status quo injusto, vil e hipócrita,
en una u otra dirección, y muchos se creen que cuando ocurra, podrán seguir parasitando como siempre.
Pero espero que empiecen a tomar ya medidas concretas y valientes,
porque tarde o temprano, los cobardes serán señalados y apartados,
Pues no sirven ni para ni una ni para otra causa.
Este es un momento clave para el futuro de la humanidad,
y muchísimas personas tenemos claro que no nos vamos a quedar simplemente mirando
o conformarnos con que nos digan lo que queremos oír.
La causa de Palestina es la causa de la humanidad, y no valen medias tintas.
Fotografía: El Salto Diario
Alemania y Estonia se han pronunciado en contra de Chat Control. Ya existe una cantidad de miembros en contra suficiente para bloquear la propuesta. Aún quedan tres miembros indecisos: Grecia, Rumania y Eslovenia.
Consejo de la UE: las decisiones se toman por “mayoría cualificada”:
Parlamento Europeo: depende del tipo de procedimiento, pero normalmente basta una mayoría simple de los eurodiputados presentes para rechazar o enmendar la propuesta. El Parlamento tiene 720 eurodiputados (tras la redistribución de 2024).
A la espera de la votación hay que seguir insistiendo y enviando correos a nuestros representantes. No se puede entender que partidos de izquierdas estén a favor de esta medida que va en contra de todos los ciudadanos europeos.
¿Que intereses tiene España para apoyar esta propuesta? ¿Por qué no se ha debatido en el congreso?
Imagina que eres un niño en un parque infantil gigantesco. Hay columpios, toboganes, y estructuras para trepar por todas partes. Pero estás solo. No ves a otros niños por ningún lado. Significa que no existen? O será que están jugando un juego mucho más complejo del que imaginas?
Esta es, en esencia, la paradoja que enfrentamos cuando miramos al cosmos. Con billones de estrellas solo en nuestra galaxia, la probabilidad matemática dice que deberíamos estar rodeados de vecinos cósmicos. Sin embargo, el universo permanece inquietantemente silencioso. La Teoría de la Evolución Cósmica Estratificada propone algo fascinante: el universo funciona como un videojuego masivo con niveles de dificultad. Pero no es un juego cualquiera; es uno donde las reglas cambian completamente según el nivel que alcances.
Piénsalo así: cuando aprendes a andar en bicicleta, primero usas rueditas de entrenamiento, luego las quitas, y finalmente puedes hacer trucos. Cada etapa tiene sus propios desafíos y recompensas. El universo podría operar de manera similar, pero a escala cósmica.
El primer nivel es brutalmente difícil. Es como intentar armar un rompecabezas de un millón de piezas... en la oscuridad... mientras alguien sacude la mesa. La Tierra tuvo una suerte extraordinaria: la distancia perfecta del Sol, una luna que estabiliza nuestro clima, un Júpiter que actúa como aspiradora cósmica de asteroides peligrosos. Es como ganar la lotería, pero no una vez, sino cientos de veces consecutivas. La mayoría de los planetas nunca pasan de ser rocas estériles o gigantes gaseosos inhóspitos. Somos los pocos afortunados que lograron iniciar el juego.
Aquí es donde las cosas se ponen interesantes. Una vez que una civilización emerge, enfrenta una serie de "jefes finales" que debe derrotar para avanzar: el Jefe Nuclear, donde deben manejar el poder del átomo sin vaporizarse mutuamente (nosotros apenas estamos pasando esta prueba); el Jefe Climático, manteniendo el planeta habitable mientras se industrializan; el Jefe de la IA, creando inteligencia artificial sin que esta decida que los humanos son obsoletos.
Pero aquí viene el giro argumental: las civilizaciones que sobreviven aprenden una lección crucial. Hacer ruido en el cosmos es como gritar en una biblioteca... una biblioteca donde algunos de los bibliotecarios tienen lanzallamas. Imagina que estás en un bosque de noche con una linterna. Encenderla te ayuda a ver, pero también revela tu posición a todos los depredadores. Las civilizaciones inteligentes aprenden rápidamente que el silencio no es cobardía; es supervivencia pura.
Pero no es solo paranoia. Es como cuando los adolescentes aprenden a no compartir toda su vida en redes sociales. La madurez trae discreción. Las civilizaciones que gritan "AQUÍ ESTAMOS!" son eliminadas, no necesariamente por malicia, sino porque el universo premia la prudencia y castiga la imprudencia. Muchos astrofísicos están comenzando a considerar que este comportamiento cauteloso podría ser una constante universal, tan fundamental como la gravedad o el electromagnetismo.
Y aquí llegamos a la parte más extraordinaria de la teoría. Las civilizaciones que logran superar todos los filtros, que dominan la tecnología sin destruirse, que aprenden a permanecer ocultas... estas civilizaciones alcanzan un nivel de consciencia diferente. Son como adultos observando un patio de recreo. No intervienen cuando los niños se pelean por un juguete porque saben que esas experiencias son necesarias para el crecimiento. Han establecido un "Protocolo de No Interferencia Cósmica" – una especie de acuerdo tácito de que cada civilización debe encontrar su propio camino hacia la madurez. Nos observan, sí, pero con la paciencia de un documentalista filmando hormigas. No es crueldad; es respeto por el proceso evolutivo.
La humanidad estaría claramente en el Nivel 2, tambaleándose entre filtros. Hemos sobrevivido (apenas) a la Guerra Fría, estamos luchando con el cambio climático, y la IA está tocando a nuestra puerta con insistencia creciente. Lo fascinante es que nuestro comportamiento ya está cambiando. Nuestras transmisiones de radio más potentes fueron en las décadas de 1970 y 1980. Ahora, con internet por cable y fibra óptica, somos cada vez más silenciosos en el espectro electromagnético. Coincidencia, o estamos intuitivamente aprendiendo las reglas del juego?
Según esta teoría, existe un momento crítico cuando una civilización está lista para "graduarse". No es cuando dominamos el viaje interestelar o la fusión nuclear. Es cuando desarrollamos algo mucho más difícil: empatía cósmica. Es el momento cuando una civilización dice: "No queremos conquistar el universo; queremos entenderlo. No queremos dominar otras formas de vida; queremos aprender de ellas." Es como cuando un niño deja de arrancarle las alas a las mariposas y comienza a estudiarlas con fascinación y respeto.
La belleza de esta teoría es que transforma el silencio cósmico de algo aterrador en algo esperanzador. No estamos solos; estamos en proceso de evaluación. No estamos abandonados; estamos en una etapa necesaria de desarrollo. Cada decisión que tomamos como especie – cada guerra que evitamos, cada problema ambiental que resolvemos, cada paso hacia la cooperación global - podría estar siendo observada y evaluada por inteligencias que pasaron por lo mismo hace millones de años.
El universo no es un vacío hostil ni un desierto estéril. Es una escuela cósmica donde el silencio no es ausencia, sino paciencia. Donde cada civilización debe escribir su propia historia de supervivencia y trascendencia. Y quizás, solo quizás, cuando finalmente estemos listos, cuando hayamos demostrado que podemos manejar nuestro poder con sabiduría, cuando hayamos superado nuestros impulsos destructivos... ese día, el silencio se romperá.
Pero no con una invasión o un mensaje dramático, sino con algo mucho más sutil: la invitación a unirse a una comunidad cósmica que ha estado esperando pacientemente a que crezcamos. Hasta entonces, el universo observa, espera, y guarda silencio. No porque esté vacío, sino porque está lleno de maestros pacientes esperando que sus estudiantes más nuevos estén listos para la siguiente lección.
Nota: Para la redacción del artículo se ha contado con ayuda de IA.
Empecemos por el principio:
Este agosto me encontraba procrastinando en mi casa viendo Tik Tok. En ese momento me saltó el video de un artista llamado Anibal que hacía una versión de un tema suyo al estilo Math Pop con la guitarra. Me pareció muy interesante, me lo guardé y le di su merecido like. Al instante fui a su Spotify a ver si encontraba esa versión.
Pero no estaba. Chasco.
En su lugar encontré una versión distinta a la que vi. Medio apenado dije, bueno mira. Al leer comentarios del video empecé a ver muchos pidiendo una versión larga de ese tema. Me dije, oye podría estar bien.
Pasan los días y veo que el artista ha hecho otro video. Que va a producir el tema al completo. Sucesivamente, en su página de Tik Tok, fui viendo la evolución de ese tema y cómo pedía consejo a la comunidad para quitar/poner/mejorar cosas.
Y adelantamos al martes pasado. Sale el tema. Aparte de gustarme porque me va el rollo Math Pop pensé en que acababa de ver algo que no había visto en directo: como un artista crea una versión condicionada por el público, en pocas semanas y viendo su evolución en “directo”
Pensé para mi mismo: acabo de ver una nueva forma de hacer música en el s. XXI y me ha parecido curioso. Es probable que ya se hubiese hecho, pero es la primera que lo vivo en primera persona y viendo el proceso.
Os dejo la versión inicial y la final para que lo comparéis:
- Inicial: www.youtube.com/watch?v=0NYEVLO06yo
- Final: www.youtube.com/watch?v=Grr0OzJWOEo
Un saludo y que no decaiga la música :D
El negacionismo del Holocausto judío consiste en el acto de negar el genocidio de los judíos durante la Segunda Guerra Mundial afirmando que es parte de una conspiración. Los que niegan el Holocausto afirman: que la «solución final» de la Alemania nazi tenía como único objetivo deportar judíos del Tercer Reich, pero que no incluía el exterminio de judíos; que las autoridades nazis no usaron campos de exterminio y cámaras de gas para asesinar a judíos en masa; o que el número real de judíos asesinados fue significativamente menor que la cifra históricamente aceptada de 5 a 6 millones, por lo general alrededor de una décima parte de esa cifra.
El negacionismo del genocidio en Gaza afirma que la violencia sistemática contra la población palestina no constituye un genocidio, sino una serie de “acciones defensivas” de Israel contra el terrorismo. Este discurso niega o minimiza las dimensiones de la destrucción de Gaza, justificando los bombardeos masivos sobre zonas densamente pobladas como “daños colaterales inevitables”, y presentando la muerte de miles de civiles —entre ellos mujeres y niños— como consecuencia exclusiva de la presencia de combatientes de Hamás.
De la misma forma que el negacionismo del Holocausto reinterpreta la evidencia histórica para proteger una narrativa política e ideológica, el negacionismo del genocidio en Gaza busca ocultar la magnitud de la violencia estructural y la desproporción del uso de la fuerza. Quienes lo sostienen suelen afirmar:
Ambos negacionismos, aunque en contextos históricos distintos, comparten un mismo patrón: borrar la condición de víctimas de poblaciones enteras y sustituirla por un relato que justifica, oculta o banaliza el sufrimiento humano. En el caso del Holocausto, el negacionismo atenta contra la memoria histórica y contra las víctimas judías, romaníes, homosexuales, disidentes políticos y otros grupos exterminados por el nazismo. En el caso de Gaza, el negacionismo atenta contra la capacidad de reconocer y detener una catástrofe humanitaria en curso.
El negacionismo, en cualquiera de sus formas, no solo falsea la verdad, sino que allana el terreno para que atrocidades presentes o futuras sean toleradas. Recordar y reconocer los genocidios no es un ejercicio académico, sino un acto político y ético fundamental: sin memoria no hay justicia, y sin justicia no hay futuro en paz.
Consulta en Wikipedia: es.m.wikipedia.org/wiki/Negacionismo_del_Holocausto
En España como casi todo lo tecnológico llega tarde y mal. El coche eléctrico no va a dejar de serlo. La falta de tecnología en el país del ladrillo y el turismo no solo se refleja en la falta de trabajo en sectores industriales y tecnologícos e I+D, sino en algo que está teniendo mas implantación en otros paises de la UE que en España.
En la siguiente tabla se ven algunos porcentajes de implantación del coche eléctrico en algunos países de la UE:
País |% nuevas matriculaciones BEVs | Notas
Noruega: 90-95 % Líder mundial, casi todo el mercado es eléctrico.
Dinamarca: 50-68 % (BEV+PHEV) BEVs mayoría, fuerte crecimiento.
Suecia: 55-60 % (BEV+PHEV) Alta adopción, sobre todo PHEVs también.
Países Bajos: 50-53 % (BEV+PHEV) BEVs muy comunes, red pública muy amplia.
Bélgica: ~28-30 % BEVs Si sumamos PHEVs llega al 40-45 %.
Alemania: 14-19 % BEVs Bajada tras la retirada de ayudas estatales.
Francia: ~20 % BEVs Si sumamos PHEVs, alrededor de 25 %.
España: 8-9 % BEVs Muy por debajo de la media UE.
Reino Unido: ~19.6 % BEVs ~29 % si sumamos PHEVs.
UE (media): 15-16 % BEVs Gran variación entre norte y sur.
Desde el punto de vista tecnológico, la carga de las baterías de un vehículo eléctrico debería de ser lenta para la durabilidad de las mismas.
Carga lenta (AC, 7–11 kW en casa, varias horas)
Carga rápida (DC, 50–350 kW en electrolinera, 20–40 min)
Los fabricantes lo saben, y por eso:
Por lo tanto, lo mejor para prolongar la vida de la batería de un coche eléctrico es una carga lenta durante la noche. Pero es algo que en España es en muchos casos inviable por falta de espacio para ello. Quizás es junto con el precio, el principal motivo de falta de implantación de este tipo de vehiculos en España, como se ven en los porcentajes de la tabla de arriba.
Segun ChatGPT, tener cargador propio en casa sería lo ideal:
Tener garaje propio con cargador (wallbox) es casi imprescindible si quieres aprovechar bien un coche eléctrico. Te explico por qué:
👉 En cambio, si no tienes garaje y dependes siempre de la carga pública:
Y si encima se dispone de panel solar en el tejado, pues aún más ideal para el coche eléctrico:
Eso sería lo ideal y el “combo perfecto” para un coche eléctrico. Te detallo por qué:
👉 Resumen:
Sí, una casa con garaje y paneles solares es la situación óptima para tener un coche eléctrico:
Pero, junto con el precio y que España es uno de los paises de europa con mayor densificación de las ciudades y donde menos garajes privados o zonas privadas de carga existen o se puedan instalar, hace que estemos a la cola de Europa en la implantación de este tipo de vehículo, y puede que lo sigamos estando por las siguientes décadas.
Fidel Martínez (Sevilla, 1979) es una de las voces más interesantes y personales del panorama del cómic actual de nuestro país gracias a sus colaboraciones con Jorge García y su trayectoria posterior en solitario, con obras tan redondas como Fuga de muerte, Sarajevo Pain, Arconte o la novela gráfica que ahora nos ocupa, Hijos del fuego, publicada en Norma Editorial, en febrero de 2025. En ella, se narra la historia de varios personajes, un grupo de exploradores furtivos llamados “stalkers”, que se introducen en una zona fantasma, en las inmediaciones del reactor nuclear de Chernóbil, zona totalmente prohibida por los restos de la radioactividad que todavía se se encuentra en ella.
Es una obra inmensamente lírica, que comienza como una aventura de terror para terminar como una inmensa fábula ecológica que nos enseña que la naturaleza seguirá creciendo, a pesar de los seres humanos, auténticos virus para el planeta en el que vivimos. Ayuda a esa sensación de terror inicial las viñetas con las se construye esta historia, con algunas dobles páginas magníficas, en un blanco y negro magistral, una característica propia del autor a lo largo de su carrera profesional. Un claroscuro que parte de figuras como Milton Caniff y se consolida en los trabajos de Alberto Breccia y José Muñoz. Además de estos dibujantes, otra de las referencias de esta novela gráfica, que no pertenecen al ámbito de la historieta, son el constructivismo pictórico y la arquitectura racionalista soviética que, como el autor afirma, le confieren a las imágenes “rotundidad, además de expresividad”. Uno de los grandes méritos del autor, Fidel Martínez, es el de unir todas estas influencias y dar a ellas una voz tan auténtica como magnífica.
Hay que recordar, de todas formas, que el aspecto visual está supeditado al desarrollo de unos personajes redondos que evolucionan a la par que lo hace la trama. Unos personajes, repletos de contradicciones, que están devorados por la culpa y la curiosidad, incapaces de comprender que son, apenas, seres insignificantes frente a la inmensidad de una naturaleza, que se encuentra aquí simbolizada en dos personajes mitológicos que dan una trascendencia absoluta al relato. La curiosidad y la culpa no son los únicos temas que se presentan en esta novela gráfica, dado que también aparecen la pequeñez del ser humano, como se ve en esas maravillosas viñetas en las que los personajes caminan por el entorno, rural y urbano, de Chernóbil; la soledad, la muerte, en definitiva, temas comunes a las grandes obras, que dan lugar a una fábula moral tremendamente efectiva.
Una trama, asimismo, narrada a través de varios periodos temporales que acaban por entrelazarse: el primero comienza en una época que transcurre hace más de 14000 años; una segunda, poco después del accidente nuclear de Chernóbil y una última, en la que se hacen presentes las consecuencias de los periodos temporales anteriores, en la que, además, los personajes afrontan todos los problemas creados anteriormente y en la que ya personajes reales y mitológicos se enfrentan entre sí.
hay que recordar, por último, uno de los elementos más importantes de esta novela gráfica: el simbolismo, con dos personajes, que representan la muerte y el nacimiento del ciclo de la naturaleza y se hacen importante a lo largo de todas las páginas que componen una historia, sencillamente, excelente. Son dos personajes alegóricos que narran la historia de Chernóbil a lo largo de siglos, desde la adoración inicial de los seres humanos primitivos al posterior rechazo y caza de esos mismos seres humanos a lo largo de los siglos.
Esta novela gráfica es una obra tremendamente lírica, tanto en el guion como en el aspecto visual, que destaca por una narrativa sugerente, con una serie de viñetas tan espectaculares como aterradoras, un desarrollo magistral de personajes devorados por sus imperfecciones. Una historia con un final repleto de esperanza en el que el personaje principal encuentra, por fin, la la redención y la comunión absoluta con el entorno natural que lo rodea. En suma, Hijos del fuego es una fábula ecológica en la que, como el mismo autor, Fidel Martínez, dice: “la naturaleza prevalecerá, a pesar de todos nuestros excesos y desmanes”.
Hijos del fuego, Fidel Martínez (Sevilla), febrero de 2025, 160 páginas.
Buenos días
Voy a comenzar poniendo el siguiente video de youtube, que voy a utilizar como marco y contexto:
Una vez dado el contexto suficiente os pregunto:
¿Qué modelo queremos para la televisión pública?
Está claro que el modelo actual favorece que el gobierno de turno (autonómico o estatal) meta mano y haga de su capa un sayo. Contrariamente a lo que dice Iglesias, creo que lo que hay que hacer es generar una legislación para asegurar que independientemente del gobierno que toque, la pública sea independiente, tanto a nivel estatal, como a nivel regional.
Las televisiones no pueden estar a un individuo de ser herramientas de propaganda y, como se puede ver a lo largo y ancho de nuestro país eso es lo que pasa a día de hoy. Con las televisiones privadas es mucho más complicado, ya que quien paga manda (aunque creo que gran parte de las medidas se podrían incluir y serían positivas también para la privada), pero con la pública debería de ser irrenunciable.
Esto daría para abrir un debate sobre el sector público en general pero, centrándonos en el tema de marras, ¿Qué se podría hacer para garantizar la independencia y la neutralidad de las televisiones públicas? Aquí planteo algunas ideas:
¿Qué opinas tu?, ¿te gustan estas ideas?, ¿añadirías alguna cosa?
menéame