Frases y fragmentos de libros
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Cuento - "El pescador"

Un rico empresario estaba de viaje de negocios en una isla cuando, al acercarse al puerto, vio a un pescador tranquilamente acostado sobre su barco tomando un té y leyendo un libro. Le picó la curiosidad el hecho de que en plena hora de pesca, aquel hombre estuviera allí descansando.

-¡Hola, buenos días! -saludó amablemente el empresario.

-¡Buenos días! -le contestó el pescador.

-¿No sale a pescar hoy?

-Sí, ya salí esta mañana y en dos horas ya pesqué lo suficiente para el día.

-Vaya... ¿y por qué no pesca más de lo que necesita?

-¿Y para qué iba a hacer eso? -le contestó sorprendido el pescador.

-Pues... porque así ganaría usted más dinero -fue la respuesta del empresario. Y con ese dinero podría comprar un motor para la barca.

-¿Y para qué querría yo un motor en la barca?

-Bueno, con un motor podría ir a aguas más profundas, allí donde hay muchos más peces.

-Vaya... pues no lo había pensado, pero, ¿para qué quiero yo pescar más peces de los que necesito? -preguntó de nuevo el pescador.

-Pues porque así los podría vender y ganaría más dinero, y con ese dinero podría comprar mejor material; por ejemplo, anzuelos y redes nuevas que pescasen más peces aún... y con ese dinero podría usted comprar otra barca más.

-Pero... ¿y para qué quiero yo dos barcas? -preguntó de nuevo el pescador.

-Pues para contratar a alguien y ganar más dinero aún, y con ese dinero usted podría comprar otra barca más, y otra, y otra... y al final tendría una gran flota y un montón de gente trabajando para usted. Y de esa forma, seguramente conseguiría ser tan rico como lo soy yo.

-Pero, y cuando fuera tan rico como usted, entonces, ¿a qué me dedicaría?

-Pues es fácil -rio el empresario. Podría sentarse y disfrutar de la vida.

-¿Y qué cree que estoy haciendo en este momento?

Cuento sufí

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La falsedad (Cicerón)

La falsedad (Cicerón)

Las vanas pretensiones caen al suelo como las flores. Lo falso no dura mucho.
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Cita de Winston Churchill

"Nunca llegarás a tu destino si te paras a tirar piedras a cada perro que ladra".

Atribuida a Winston Churchill

 

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Cita - Temores

Cita - Temores

"A cada día le bastan sus temores, y no hay por qué anticipar los de mañana".

Charles Péguy



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Cita de Charles Bukowski

“Nuestra sociedad la hemos formado con nuestra falta de espíritu; es como si nos la mereciésemos”.

Charles Bukowski

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La conjura de los necios (fragmento)

"Soy capaz de tantas cosas y no se dan cuenta. O no quieren darse cuenta. O hacen todo lo posible por no darse cuenta. Necedades. Dicen que la vida se puede recorrer por dos caminos: el bueno y el malo. Yo no creo eso. Yo más bien creo que son tres: el bueno, el malo y el que te dejan recorrer. El bueno lo he intentado andar y no me ha ido bien. Juro que ha sido así. De pequeño hice todo lo que consideré correcto y lo que está bendita New Orleáns, con sus acordes de ébano y sus insoportables chaquetas a rayas me inducía a hacer. Estudié profundamente y traté de trasladar mis conocimientos con pasión. Los estudiantes saben eso. También escribí encerrado en un pequeño mundo cuarto juntando frases, frustrándome ante las huidizas buenas palabras y las no menos resbaladizas imágenes, comparaciones, situaciones, personajes, diálogos. Asumí estar en ese camino porque es ese el modo como se consiguen los sueños. Al menos eso creía hasta un día, cuando tenía todo acabado y faltaba la confirmación de que había decidido bien, no hubo recompensa. No hubo zanahoria, Ahí me di cuenta de que ya estaba caminando, lejos de mi voluntad, por la otra senda. Esa que no es la buena ni la mala. Porque está claro que la buena es buena porque es una opción propia. La mala es mala porque también es tu opción. Pero la otra no es algo que hayas escogido, por lo cual no pueden decir que es ciertamente buena o ciertamente mala. Es ciertamente ajena, impropia. Por ese camino involuntario caminé, llevado de las narices, arrastrado como un palo sin poder animarme. Tuve que resignarme a ser como ellos me ordenaban, a aceptar sus juicios y sus rechazos. A comprobar una vez más que no todos pueden ver más allá de su aliento. A ser víctima de un sistema que hace de gente como yo infelices zombies o incomprendidos. Y hay que tener el espíritu muy bien templado, tal vez como acero damasquino o más, para afrontar semejante fuerza. "

John Kennedy Toole

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Dios los cría...

“Un tonto encuentra siempre otro más tonto que lo admira.”

SIR ARTHUR CONAN DOYLE (Sherlock Holmes)

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La carga

Un beduino viajaba, montado en un camello cargado de trigo. En el camino

encontró a un hombre que le hizo mil preguntas sobre su país y sus bienes.

Después le preguntó en qué consistía la carga de su camello.

El beduino mostró los dos sacos que colgaban a una y otra parte de la silla

de su montura:

"Este saco está lleno de trigo y este otro de arena."

El hombre preguntó:

"¿Hay alguna razón para cargar así tu camello con arena?"

El beduino:

"No. Es únicamente para equilibrar la carga."

El hombre dijo entonces:

"Hubiese sido preferible repartir el trigo entre los dos sacos. De ese modo,

la carga de tu camello habría sido menos pesada.

¡Tienes razón! exclamó el beduino, eres un hombre con una gran agudeza

de pensamiento. ¿Cómo es que vas así a pie? Monta en mi camello y dime:

siendo tan inteligente ¿no eres un sultán o un visir

?-No soy ni visir ni sultán, dijo el hombre. ¿No has visto mi vestimenta?"

El beduino insistió:

"¿Qué clase de comercio practicas? ¿Dónde está tu almacén? ¿Y tu casa

?-No tengo ni almacén ni casa, replicó el hombre.

-¿Cuántas vacas y camellos posees

?-¡Ni uno solo!

-Entonces ¿cuánto dinero tienes? Porque gozas de una inteligencia tal que

podría, como la alquimia, transformar el cobre en oro.

-Por mi honor, ni siquiera tengo un trozo de pan que comer. Voy con los

pies descalzos, vestido de harapos, en busca de un poco de comida. Todo lo que

sé, toda mi sabiduría y mi conocimiento, ¡todo eso no me trae más que dolores

de cabeza!"

El beduino le dijo entonces:

"¡Márchate! ¡Aléjate de mí para que la maldición que te persigue no recaiga

sobre mí! Déjame irme por ese lado y toma tú la otra dirección. Más vale

equilibrar el trigo con arena que ser tan sabio y tan desventurado. Mi idiotez es

sagrada para mí. ¡En mi corazón y en mi alma está la alegría de la certeza!"

Cuento sufí

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Cita de Søren Kierkegaard

Cita de Søren Kierkegaard

¡Qué irónico es que precisamente por medio del lenguaje, un hombre pueda degradarse por debajo de lo que no tiene lenguaje!

Søren Kierkegaard

Biografía



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Fragmento - Oryx y Crake

"En fin, tal vez no existían soluciones. La sociedad humana, aseguraban, era una especie de monstruo, y sus principales subproductos eran los cadáveres y los escombros. Nunca aprendía, siempre repetía los mismos errores estúpidos, siempre escogía los beneficios inmediatos a costa de un sufrimiento a largo plazo."

Margaret Atwood - Oryx y Crake (2003)

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Yo soy yo

Yo soy yo y mis putos problemas, y si no los resuelvo a ellos, yo no tengo solución.

De los famosos pensadores Ortega y Gasset.

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Santiago Ramón y Cajal

"Razonar y convencer, ¡qué difícil, largo y trabajoso! ¿Sugestionar? ¡Qué fácil, rápido y barato!”

Santiago Ramón Y Cajal

Médico y escritor español

(1852-1934)

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Vil Metal

Quienes creen que el dinero lo hace todo, terminan haciendo todo por dinero.

Voltaire.

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Cita - "Las guerras..."

“Las guerras no tienen memoria y nadie se atreve a comprenderlas hasta que ya no quedan voces para contar lo que pasó, hasta que llega el momento en que no se las reconoce y regresan, con otra cara y otro nombre, a devorar lo que dejaron atrás.”

Carlos Ruiz Zafón, “La sombra del viento” (2001)

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Cita de Susan Ertz

Cita de Susan Ertz

“Hay millones de personas que suspiran por la inmortalidad cuando no saben qué hacer una tarde lluviosa de domingo”.

Susan Ertz

Fuente

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Margaret Atwood

Men are afraid that women will laugh at them. Women are afraid that men will kill them.

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Charles Bukowski

Necesito verte, pero no te veo.

Necesito escucharte, pero no te escucho.

Necesito tocarte, pero no te toco.

Necesito pensarte...¡y es lo único que hago!

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Cita de Friedrich Nietzsche

Cita de Friedrich Nietzsche

“Pido pues a mi orgullo que siempre vaya del brazo con mi cordura. Y cuando me abandone mi cordura, pues le gusta alzar el vuelo, que mi orgullo vuele siquiera del brazo con mi locura”.

Friedrich Nietzsche



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Creencias irracionales - George Lakoff

"La idea de que la gente abandonará sus creencias irracionales ante la solidez de la evidencia presentada ante ella es en sí misma una creencia irracional, no apoyada por la evidencia".

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Cita de Stendhal

Cita de Stendhal

 

“Las religiones son fundadas en el miedo de muchos y en la vivacidad de pocos”.

Stendhal

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Cita - El odio

“Cuando nuestro odio es demasiado profundo, sin duda nos coloca por debajo de aquellos a quienes odiamos”.

Francisco de La Rochefoucauld (1613-1680)

Biografía

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Para vivir

Para vivir, hay que aprender que el agua vuelve al mar

Y que sufrir también es parte de este caminar

Se recomienda no pensar tanto y crecer sin hacerse mayor

Que entre tanta dudosa certeza, cuanto más te equivoques mejor.

Juan Gómez Canca

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Cuento - "El rey generoso"

Un rey muy poderoso, que un día se aburría, convocó a un derviche y le pidió que le contara una historia.

- Majestad – respondió el derviche – le contaré la historia de un rey que fue el más generoso de todos los tiempos, porque si os parecéis a él seréis ciertamente el más grande de todos los reyes vivos.

Se sintió crecer una gran tensión entre los que escuchaban este intercambio de palabras, porque nadie hablaba así al rey. Era costumbre regalarle los oídos diciéndole que ya era el más grandioso rey vivo, porque por su puesto poseía las más grandes cualidades en un grado nunca igualado.

- Cuéntame esa historia – replicó el rey, visiblemente enfadado – pero ten mucho cuidado, porque si tu historia no está a la altura de tus palabras se te cortará la cabeza por haber calumniado a tu rey.

El derviche, sin dejarse intimidar lo más mínimo, contó entonces la larga historia de un rey que sacrificó su reino e incluso su propia persona para que nunca nadie pudiera sufrir por su causa.

Después de escuchar esta historia, que le había cautivado, el rey olvidó sus amenazas y declaró:

- He aquí un excelente cuento, derviche, del que sabré sacar buen provecho. Tú no puedes sacar partido de él porque no posees nada y no tienes nada para dar. Has renunciado a todo y no esperas nada más de esta vida. Pero yo, yo soy un rey, rico y poderoso, y verás que puedo mostrarme el más generoso de todos, más de lo que jamás podrías imaginar. Sígueme y mira bien lo que voy a hacer.

El rey se fue a lo alto de una colina que podía verse desde toda la ciudad y convocó allí a sus mejores arquitectos, ordenándoles construir una inmensa edificación compuesta por una gran sala central rodeada por un muro con cuarenta ventanas. Después ordenó que se trasladara una parte importante de su tesoro al interior de este edificio. Todos los medios de transporte fueron movilizados para transportar montones de piezas de oro, lo que llevó mucho tiempo.

Una vez que todo estuvo listo, el rey hizo anunciar por todo el reino que cada día él aparecería en cada ventana con el fin de distribuir sus riquezas entre los indigentes del reino.

Rápidamente la noticia se extendió, y cada día los necesitados se presentaban alrededor de las numerosas ventanas para recibir algunas monedas de oro de las manos del soberano.

Al cabo de varios días, el rey reparó en la jugada de un hombre, claramente un derviche, que cada día venía, cogía una pieza de oro y después se iba, sin siquiera dar las gracias al rey, al contrario que los demás mendigantes.

El rey se sorprendió de ver a tal hombre venir así para coger piezas de oro. Al principio, encontró buenas razones, diciéndose que era sin duda para distribuir aquellas piezas a algunos pobres, que era una forma de caridad. Pero la sospecha fue tejiendo lentamente su red, y al final de una cuarentena de días, su paciencia al límite, el rey se irritó abiertamente de este jueguecito e interpeló al derviche:

- ¡Especie de ingrato! ¿No sabes dar las gracias por lo que hago? ¿No puedes inclinarte como los otros? Vienes día tras día a recibir una pieza de oro, ¿no podrías por lo menos sonreír como signo de agradecimiento? ¿Hasta cuándo va a durar esto? ¿Es que por casualidad te aprovechas de mi generosidad para hacerte rico, o para practicar la usura? ¡Tu comportamiento no es digno de un derviche! ¡Llevas ese atuendo remendado para engañarnos mejor!

En cuanto hubo pronunciado esas palabras, el derviche sacó las cuarenta piezas de oro de su bolsa y las tiró a los pies del rey:

- ¡Recupera tu oro, rey generoso! Y sabed que la generosidad no tiene sentido sin tres condiciones.

Dar sin experimentar el sentimiento de ser generoso.

Dar sin esperar nada a cambio.

Dar sin dudar nunca de nadie.

¿Sabrás tú, jamás, ser generoso?

Cuento sufí

¿Esperamos siempre algo a cambio? 

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Cita de José Luis Sampedro

“Yo no puedo decir si hay Dios o no. Creo que no, pero no tengo seguridad. Ahora, tengo la seguridad de que el Dios que nos vende el Vaticano es falso, y lo compruebo leyendo la Biblia con la razón y no con la fe. Cuando creemos lo que no vemos, acabamos por no ver lo que tenemos delante.“

José Luis Sampedro 

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Cómo tratar a los herejes

Matadlos a todos, Dios ya reconocerá a los suyos.

Arnaud Amaury, monje cisterciense, legado personal del papa Inocencio III para la cruzada contra los herejes cátaros.

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menéame