Sabían que no iba a defraudarlos y, en efecto, en el estreno Toni consiguió que en toda la Comunidad Valenciana la inmensa mayoría de espectadores huyera en masa hacia otras cadenas, apagara la televisión, se pusiera a leer un libro o se fuese a la cama. No se entiende que el público no respondiera a un programa sobre feminismo con Lucía Etxebarria y Juan Soto Ivars como principales contertulios. Quizá nadie advirtió el irreverente tono cómico del debate o quizá Toni tendría que haber invitado también a Alessandro Lecquio para impartir...