¿Cuántas veces escuchamos aquello de que el coche a hidrógeno sería «el futuro»? Pues bien, ese futuro lleva ya mucho tiempo desplomándose como un castillo de naipes. Ayer mismo, Stellantis, el cuarto mayor fabricante del mundo, anunció que cancela todo su programa de pila de combustible porque el H₂ «no compensa sus enormes inconvenientes». En la primera mitad de 2024 tan solo se vendieron 5,621 vehículos de hidrógeno, frente a 4.5 millones de vehículos eléctricos de baterías...