Antonio Caño cumplirá estos días 32 meses (dos años y medio) como director de El País, un periodo muy turbulento en el que siempre ha ido a peor su relación con la opinión pública, la redacción y hasta los lectores. El último episodio ha sido la estrambótica carta en la que pedía perdón a sus suscriptores por la “efervescencia” del editorial que hace unas semanas pedía la salida de Pedro Sánchez. Pero no es el único episodio. Caño ha hecho algo que parecía casi imposible en el sector: hacer bueno a su antecesor Javier Moreno.
Comentarios
Su "efervescencia" a la hora de apuñalar.
Ahora se llama efervescencia, antes se llamaba hijoputismo puro y duro.
?Caño,efervescencia,director del país?...blanco y en bolsa
Caño. No te marches nunca, eres el punto amo. Podemos!!