Ojalá existiese una asignatura en todas las escuelas y hogares que enseñase el ARTE DE EQUIVOCARSE, el de encajar golpes. Que explique que la vida no es sencilla ni previsible, que nos ejercite a creer en la voluntad y el empeño, en el trabajo y la constancia, a aceptar la vulnerabilidad.
#7 se te ocurre un ejemplo mejor de lo que yo he dicho? Si no te parece un buen ejemplo, explícate, por favor. Porque hasta los jueces le dicen ya a doña Juana que lo deje porque da vergüenza ajena. No estoy pretendiendo generalizar de ninguna manera, hablo de ella y sólo de ella.
Uno de los grandes problemas de las dos últimas generaciones es el no saber/entender lo que es la frustración.
No pasa nada por no ganar siempre,de las derrotas también se aprende
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#7 se te ocurre un ejemplo mejor de lo que yo he dicho? Si no te parece un buen ejemplo, explícate, por favor. Porque hasta los jueces le dicen ya a doña Juana que lo deje porque da vergüenza ajena. No estoy pretendiendo generalizar de ninguna manera, hablo de ella y sólo de ella.
Es lo que tiene estar en una sociedad donde esta mal visto el fracaso.
Cagadas se hacen a mansalva, no hay otra, así se aprende, pero las ocultamos, como si fueran vergonzosas.
Uno de los grandes problemas de las dos últimas generaciones es el no saber/entender lo que es la frustración.
No pasa nada por no ganar siempre,de las derrotas también se aprende
#1 de las derrotas también se aprende
Te diría que de las derrotas es de lo que más se aprende.
#3 El éxito y el triunfo son pésimos maestros.
#3 suponiendo que quieras aprender. Ahí tenemos a Juana Rivas, de derrota en derrota y no aprende.
#6 , toma,que se te ha olvidado ponerlo
Lo deberian enseñar en el colegio. Equivocarse es aprender.