La hipótesis podría formularse más o menos así: millones de brasileños influidos por una muy eficaz estrategia comunicacional de la ultraderecha en las redes sociales habrían abrazado el autoritarismo. Es el regreso de la teoría de la bala mágica o de la aguja hipodérmica desarrollada por Harold Lasswell durante la Primera Guerra Mundial, que supone que un mensaje tiene el efecto previsto, directo, sobre su destinatario. El pensamiento progresista queda en el lugar del listo que lo ve venir aunque no pueda hacer nada para evitarlo.
Comentarios
Ojo: "Como si no hubiera filtros, Jair Bolsonaro fue capaz de presentarse como un austero outsider en contraposición a los corruptos políticos. Bolsonaro forma parte del Partido Social Liberal, al que se afilió en 2016. Pero antes había sido diputado durante 11 años por el Partido Progresista. Más aún, el abanderado de la lucha contra la corrupción ha estado afiliado durante 27 años al partido que más cuadros procesados tiene en la ‘operación Lava Jato’. Como si en España un outsider decidido a luchar contra la corrupción viniera del Partido Popular."
AEDE.
#5 Si te lees el artículo, comenta que ha habido poca contundencia con el tema de la corrupción por parte del PT, algo que ha aprovechado Bolsonaro a su favor para hacer campaña.
Tampoco es que sea un artículo muy largo de leer y a mi entender muy escueto, pero al menos empieza a comentar algo más en frio de lo que ha pasado.
¿Obama perdió con Trump?
Claro, Claro, los votantes son tontos si no votan lo que yo digo.
Porque yo se mucho mejor que ellos cual es su interes, ellos apenas son tontitos.
Realmente si estas ideologias tuvieran el poder nos quitarian el voto al momento.
Alla con los votantes y su responsabilidad. La libertad de voto exige apechugar con el resultado. Obviamente el problema es la Libertad, sea para votar, sea para pensar o para ganarse la vida. La libertad individual es el problema, y la solucion? pues obviamente el estado colectivista que lo totalice todo, hasta el voto.
#3 Si te lees el artículo dice lo siguiente
La campaña es una muestra compacta de cómo se produce, circula y reproduce la desinformación. Que sea efectiva muestra las consecuencias del descuido de la educación y de los espacios de formación de la opinión pública. Los votantes no son tontos, pero están enfadados, y la ira es mala consejera. En las redes sociales, como han mostrado Natalia Aruguete y Ernesto Calvo en sus análisis de Twitter, la polarización se traduce en el armado de comunidades que generan un efecto ‘cámara de eco’. La información generada vuelve como un espejo y refuerza las preferencias, porque sólo existe aquello con lo que los usuarios se identifican. Una llamada a gritos a pensar y planificar de forma responsable el rol de la comunicación (y la deliberación) en las democracias contemporáneas.
#4 esa es la misma basura de la cámara de eco con la que se justificaba Obama al perder con Trump.
También dijeron que fue culpa de las redes y tal, cuando las redes y los medios de masas apoyaron y apoyan sectariamente a los liberales allí, lo progres aqui.
Es simplemente mal perder.
#5 Trump ganó a Hillary, no a Obama.
#5 Sí, ya hemos visto el buen ganar de esa aberración que es Trump.
Yo no creo que los votantes brasileños sean más tontos que los europeos. Lo veo como un problema actual de todas las sociedades democráticas. La democracia funcionó muy bien en sociedades previas a Internet y sin grandes problemas económicos.
Antes de que existiera Internet, la gente que no era muy lista no conocía mejor sitio donde informarse que a la gente presuntamente mas culta y mas lista y se dejaba convencer por aquellos que consideraba más sabios, pero hoy en día la gente insegura que no es muy lista se deja condicionar por aquellos que comparten el mismo tipo de problemas que ellos y también por la gente que hace más ruido. Eso a sido posible gracias a las redes sociales, que han actuado multiplicando la estupidez, las mentiras y la manipulación.
Internet y redes sociales, son unas herramientas que la gente pensó que podría ayudar a la democracia pero que se ha convertido en un arma devastadora en anos de los manipuladores con dinero suficiente para comprar ruido en redes sociales. Ni Internet ni las redes sociales son el problema. Tenemos instrumentos muy potentes, pero no sabemos manejarlos.
Por otra parte, la democracia debería haber evolucionado para blindarse ante este tipo de manipulaciones. Tal como está la situación , una persona un voto, no garantiza el acierto del pueblo soberano, y para cambiar algo tan delicado que es el pilar de las democracias habría que cambiarlo todo. La otra solución, cambiar Internet, o cambiar las redes sociales parece tan utópica como la primera.
Estamos en manos de unos mercados globalizados que se imponen a las políticas débiles fragmentadas por las fronteras. La fiscalidad es uno de los aspectos que ha salido peor parado, gracias a los paraísos fiscales. Estamos en una situación de CAOS político, social y económico, lo que ha pasado en Brasil es una buena prueba de ello pero no es el primer caso.
Si álguien tiene la solución, que lo diga.
No hay mayor ultraderecha que el conglomerado neoliberal que gobierna la UE. Que se quiten las máscaras y nos prohiban votar porque de eso se trata esto de que no les jodamos el sistema que tan bien les va a unas élites.