Una antigua canción infantil contaba que cuando Mambrú se fue a la guerra, dejó “dolor, dolor y pena”. Lo que no decía es qué parte de los ahorros se llevó. Ni tampoco si la familia estaba o no de acuerdo. Hoy en día, las asociaciones antimilitaristas invitan a los ciudadanos a negarse a financiar con sus impuestos el gasto militar. Nos lo cuenta Jesús Paz (Cádiz, 1963), integrante del Colectivo Mambrú, que impulsa el proyecto social recomendado este año como alternativa por objetores fiscales de toda España.
Comentarios
#0 Duplicada: "Calculamos que el gasto militar por habitante supera este año los 700 euros"
"Calculamos que el gasto militar por habitant...
eldiario.es