Un gigantesco cocodrilo de cuatro metros de longitud ha devorado a Melas Mero, un niño de 11 años de Papúa Nueva Guinea, mientras pescaba pescaba junto a sus padres. Según ha informado la versión en línea del diario «Daily Mirror», el animal arrastró con su cola al pequeño y, tras lanzarle al agua, acabó con su vida.
Comentarios
Ya es raro que lo vean los padres... Los cocodrilos no son muy de ir en familia cuando ya son mayores!
#2 Y lo raro es que no le dieran un cachete y le dijeran "Cocodrilito, no te comas las cosas que te encuentres tiradas"
Si es que los visten como pollos.
Pobre niño