Es pretenciosísimo decir que a base de dejar cafés pagados en los bares "podemos ser la primera generación que acabe con la pobreza". Y el titular, ni medio se ajusta al corto.
Oye, qué negocio más bueno para las cafeterías:
1º Recogen donativos de sus clientes.
2º Obligan a gastarlos en su local en un producto adictivo que no alimenta.
3º Se quedan con el beneficio.
¿Es así o me he perdido algo?
Y al pobre hombre del corto le diría:
a) que la generosidad no está reñida con la inteligencia,
b) que cuatro plátanos aprovechan más que un café,
c) que su mujer es un poquito impertinente.
Comentarios
Es pretenciosísimo decir que a base de dejar cafés pagados en los bares "podemos ser la primera generación que acabe con la pobreza". Y el titular, ni medio se ajusta al corto.
Oye, qué negocio más bueno para las cafeterías:
1º Recogen donativos de sus clientes.
2º Obligan a gastarlos en su local en un producto adictivo que no alimenta.
3º Se quedan con el beneficio.
¿Es así o me he perdido algo?
Y al pobre hombre del corto le diría:
a) que la generosidad no está reñida con la inteligencia,
b) que cuatro plátanos aprovechan más que un café,
c) que su mujer es un poquito impertinente.