En el Madrid oculto de las fábulas y las anécdotas, la del PP regional es una historia real. De liberalismo salvaje, de corrupción, de poder, de venganza, de ambición, de traición y de fascinación por el dinero. Unas veces para la financiación ilegal del partido y otras, para el enriquecimiento propio. Todo en medio de una guerra de familias, en la que durante años chapoteaban también empresarios, policías e incluso algunos periodistas sin que la dirección nacional del partido pusiera orden ante tanto desmán. Pues aún así, el PP sigue en el Gob
Comentarios
Y luego escribes otra con los socialistas con sus circos electorales.
Los políticos deberían estar al servicio de sus electores y no para hacer negocio.
Son el gestor de lo publico al servicio de todos, pero algunos se comportan como vulgares proxenetas y prostituyen la política al propio beneficio.
un negocio que te permite tener un nuevo proyecto de vida ... jajajaja