Son testigos hoy mudos de una época que no volverá, vestigios de un pasado frenético que se movía al son de los ritmos más radicales del baile. La música máquina y el techno house, y otros sonidos menos agresivos, propulsaban sus decibelios desde auténticos templos que entraban en trance de noche y de día. Los ochenta y parte de los noventa fueron los años de la ruta del bakalao y de estas discotecas, algunas colosales y desmesuradas, que el tiempo ha ido clausurando pero cuya huella se atisba en el tiempo entre ruinas y pintadas de decadencia
Comentarios
Algún día alguna revivirá como macroputiclub o como hiperchino. La estética ya la tienen.
Una de las más terroríficasterroríficas es el antiguo Bogart de Vitoria, reconvertida en... la sede de la Seguridad Social!!
Son los restos de la ruta del bacalao. Curiosamente tres de ellas, Chocolate, Puzzle y Villa Adelina (que en mis años mozos era conocida como Villa Papelina) están en apenas 1 Km de la carretera que va de Sueca a Valencia por la El Saler
No está mal, pero podrían añadir alguna más, especialmente ((Radical)), tanto la de Alcalá como la de Torrijos.
Si tuviera pasta compraba alguna...
Que post mas cutre ¿no? Una fotico desfasada, un poco de texto y a pillar tráfico.
En todo caso copia/plagio -> http://www.elviajerofisgon.com/destinos-del-viajero/las-discotecas-abandonadas-mas-impresionantes-de-espana/
PS.
Y las fotos son fusiladas a El Mundo http://www.elmundo.es/album/comunidad-valenciana/2014/11/16/5466361f268e3e53088b456a.html
#9 ¿porqué lo preguntas?
He estado en dos de ellas: Pont Aeri y Scorpia.
#5 Con tu Alpha Industries?
Teatre - Mollet del Vallès, Barcelona
Falta el Club Riviera Castelldefels
Que tiempos. Venias con el coche matrícula de Barcelona y ya en el parquing los valencianos te saludaban y te daban la bienvenida por ir hasta sus discotecas. Pese a toda la droga que corría, se respiraba camaradería en los aparcamientos, aunque era imposible evitar que se desatase alguna pelea.
Todo aquello se fue yendo de madre. Pastillas que no colocaban igual, gente en los aparcamientos tratando de robar a los que salían a echar un pitillo o descansar los oídos, y peleas y mas peleas cuando el garrulismo invadió aquellas fiestas. Lógicamente la gente fue huyendo de todo eso y se acabó la fiesta.
Las dos a las que alguna vez fui yo de mozo son sendos supermercados. Un digno final.
Nadie se acuerda los domingo y lunes en Terapia (Rebolledo) lo mas vizarro y sordido de Alicante en los buenos tiempos.
Dos vueltas de campana con el coche pegué hasta arriba de cartones.