Hace 6 años | Por ClaraBernardo a publico.es
Publicado hace 6 años por ClaraBernardo a publico.es

Una de las enfermeras de las urgencias del hospital público relata las condiciones de caos y saturación en las que trabajan a diario. Algunos empleados acaban llorando ante la carga de trabajo, la falta de espacio y la posibilidad de cometer errores graves por ello. El Hospital ha informado de que ha adjudicado las obras de su rehabilitación por más de 23 millones, aunque aún falta para que empiecen las obras.

Comentarios

ipanies

#1 Cierto, los profesionales que lo promueven, seguramente, son los que no lo sufren... aunque siempre hay casos puntuales donde ademas de puta ponen la cama.

D

#3 Hay de todo, y en todas partes. En esa misma planta de la que hablas, pude ver el encanto con el que ejercía como responsable de enfermería una señora, a la que ya habrán retirado por vieja, en el peor sentido de la palabra, y porque prestaba un servicio deplorable, tanto a los pacientes como a quienes en definitiva eran sus compañeras. Hay trabajos que requieren ser vocacionales, solo de esta forma pueden realizarse como procede, y en el campo de la medicina creo que es preciso hasta dar cariño a los pacientes.

Nosepadondetirar

#4 Por supuesto que en todas las profesiones existen "caballos" pero no estamos hablando de eso, creo yo.

Hablamos de las pésimas condiciones en las que los profesionales de la salud pública de este país tienen que prestar sus servicios y la escasa atención y tiempo que podemos dedicar a nuestros pacientes debido a esas circunstancias.
Sí tienes que atender a quince pacientes en vez de atender a diez, mal vas a poder hacerlo.
No puedes "entretenerte" escuchando al paciente, casi no puedes ni llegar a mirarle a los ojos porque si lo haces la medicación de las cuatro acabas de darla a las seis (por ejemplo) y eso es debido a la falta de personal y medios y no a que no exista vocación.
Frustración y malestar, en trabajadores y pacientes, es lo que crea trabajar con tanta presión.

Una directora de enfermería no puede decirle a toda una plantilla que la que no sirva (ninguna según ella ya que la queja era del total de la plantilla) se vaya a vender calcetines, y no hacer NADA para mejorar el trabajo y la atención al paciente de esa unidad. Aumento de personal y de material es lo que debería ofrecer como solución.

En medicina, la escucha activa al paciente, la charla, la sonrisa y el trato cercano y cariñoso también son muy importantes para mejorar el estado general del paciente, su bienestar, y el de los familiares, durante el ingreso.

Y ya te digo que el personal sanitario no está libre de personas mal encaradas que más vale que se dediquen a otra cosa pero no es lo habitual afortunadamente.

D

#5 Que existan carencias sanitarias, tanto a nivel humano, como de medios no es nada nuevo, además esto solo es el principio, y en nombre de esas carencias es inútil la petición de incremento de tales medios por parte de quien fuere, eso está en el marco del área económica.

Que el ambiente hospitalario hacia el paciente sea inapropiado, lamentablemente tampoco es nada nuevo, ni a nadie sorprende, se produce incluso cuando no existe insuficiencia de medios. La realidad es que sorprenden las personas que de forma aislada muestran aprecio.

El párrafo en el que refieres la escucha “activa” al paciente es de libro, la verdad es que no suena a nada, son palabras vacías, creo que a día de hoy a la gente le basta con que el profesional sea razonablemente válido.

Creo que hablamos idiomas distintos, además a mí me encantan los caballos.

Nosepadondetirar

#6 A mí me gustan los caballos pero de cuatro patas.
La escucha activa no es de libro, es una práctica muy habitual en la relación paciente/médico, paciente/personal sanitario. Lamento que tú no lo hayas vivido o lo veas así.
Que las carencias y el trato deficiente a los pacientes no sea nada nuevo no tiene que ser algo inamovible y que hay que aceptar.

Por la parte profesional se lucha contra esto y cada vez hay más pacientes que también se implican en intentar cambiarlo por medio de las reclamaciones oportunas pasadas por registro hacia las direcciones de los hospitales Falta mucha concienciación del derecho a una sanidad digna y de reivindicación de la misma por parte de los usuarios de la sanidad pública pero cada vez seremos unos pocos más y no abandonaremos el barco sin defenderlo.
Los trabajadores y nuestras familias también somos pacientes en potencia. Yo nunca lo olvido.
Y sí, efectivamente, ni hablamos el mismo idioma ni pensamos igual.
La carencia de medios humanos y materiales y la mala gestión son la principal causa de la mala calidad de la asistencia. Siempre.
Malos profesionales hay, por supuesto, pero no son la causa principal, ni mucho menos, de la ruina sanitaria española.

D

#7 Sinceramente, creo que no merece la pena discutir desde posiciones claramente antagónicas, por eso te anticipo que si lo deseas no leas mi comentario, yo no lo haré con tu posible respuesta.

La escucha activa es maravillosa, tanto como el intercambio de criterios de forma constructiva que la misma puede conllevar. No interesa mi comportamiento al respecto.

Las reclamaciones siempre han de ser registradas, así lo dice la L.A.P., pero las que tú refieres no puedo evitar asociarlas a graves negligencias médicas en las que el corporativismo, lo caduco, la falta de honestidad, el absurdo espíritu de superioridad, y otras tantas virtudes impidan la efectividad de cualquier reclamación sanitaria.

Parece evidenciarse que no es el momento de hablar de una sanidad digna, ni de los derechos del paciente, esa es hoy una terminología obsoleta, y no es cosa mía, sino del dominio público.

Son miles las causas potencialmente válidas para justificar una deficiente atención sanitaria, y que puede ser hasta inexistente, y tan grave como las negligencias, su frecuencia y su impunidad. Cuestión distinta es que si no existen recursos financieros es mejor que no existan pacientes, y que si tales recursos se minoran año tras año ni se puede hablar de asistencia sanitaria, ni de pececitos de colores.

No conozco caballo sin cuatro patas, y prefiero no pensar en las negligencias veterinarias, ni en lo que es irracional.

Nosepadondetirar

#8 He leído tu comentario y, aunque tú no leas el mío, te puedo decir que yo no estaba discutiendo. Para mí era un intercambio de puntos de vista y opiniones dispares.
Aclarar que las reclamaciones a las que hago referencia no son por negligencias, son reclamaciones denunciando la deficiente asistencia recibida POR FALTA DE PERSONAL (enfermeras, auxiliares, celadores) Y RECURSOS como material de curas, ropa de cama y toallas, grúas para la movilización de los pacientes encamados, etc, etc...

Otra cosa, siempre es momento para exigir una sanidad digna y respeto por los derechos del paciente. Fsltaría más que no nos quedara ni eso.

Saludos.

osmarco

Ante mi ignorancia, no hay un "sindicato" de enfermeros que denuncie estas situaciones???