Hace 1 año | Por MiguelDeUnamano a publico.es
Publicado hace 1 año por MiguelDeUnamano a publico.es

Australia, años ochenta. Un día cualquiera, una avioneta lanza al vacío múltiples trozos de carne bañados en veneno. Lo hace en una región rural al norte del país, con el visto bueno de los que mandan en la zona. ¿Su objetivo? Los dingos. ¿El compuesto? Una fórmula química altamente tóxica para aves y mamíferos que se conoce popularmente como 1080. La antropóloga Deborah Bird Rose relata en su último libro la persecución que ganaderos y autoridades locales han alimentado durante años contra los perros salvajes de Australia.

Comentarios

powernergia

Supongo que esa es la misma "solución" que piden ahora los agricultores contra la plaga de conejos.

Las plagas son las consecuencias de la degradación y la esterilización de la vida natural que provoca la agricultura intensiva.

D

Para un bicho que comía conejos.

skaworld

#1
-Que me vas a contar...

b

El hombre es el mayor depredador

vvega

Un caso dingo de mención.