Francia es el corazón político de Europa. Allí el tercer Estado dirigió la revolución que hizo rodar la cabeza de un Rey. Allí nació el concepto de "izquierda". Allí la comuna de Paris se convirtió en uno de los primeros mitos del socialismo.La cultura revolucionaria y de movilización forma parte esencial del patrimonio político francés. Y esa cultura política siempre ha irradiado al resto de Europa. Es verdad que Francia es también restauración y colonialismo, mayorías silenciosas y ultraderecha.
Las revoluciones se nutren de gente hambrienta o cabreada.
Si yo fuera un dictador subvencionaria videojuegos, suscripciones de streaming y algunas apps de redes sociales para que nadie salga de su casa y tengan su cabeza ocupada. Es el pan y circo moderno.
Cabe recordar que fueron los franceses los que usurparon la poderosa corona hispánica. Y los mismos que mandaron a los cien mil hijos de san luis para aplastar a los constitucionalistas españoles y la libertad de prensa y de opinión.
Comentarios
Pablenin queriendo apropiarse de otro movimiento y van ya ...
#1 apropiarse es un palabro exclusivo de la derecha
#3 Claro que si guapi.
#3 perdón perdón, expropiarse para el, que es aún peor y eso si es muy maduro/monedero exclusivo
#1 ¿Y no dice nada del envío de armas de Irán a Rusia?
Que el envío de esas armas solo sirve para alargar el conflicto y la muerte de inocentes.
Que raro que a PIT se le olvidara denunciarlo
#1 Federico, ¿eres tú? ¿O tan solo uno de sus
lorosoyentes?#11 TROOLLLLL.
Otro spam de Pablo iglesias.
A la derechuza la está jodiendo ahora más que cuando era vicepresidente.
Las revoluciones se nutren de gente hambrienta o cabreada.
Si yo fuera un dictador subvencionaria videojuegos, suscripciones de streaming y algunas apps de redes sociales para que nadie salga de su casa y tengan su cabeza ocupada. Es el pan y circo moderno.
Así va Europa, fracasada y lamiendo el culo a los yankis. Los afrancesados y su mentalidad fracasológica no descansan nunca.
Cabe recordar que fueron los franceses los que usurparon la poderosa corona hispánica. Y los mismos que mandaron a los cien mil hijos de san luis para aplastar a los constitucionalistas españoles y la libertad de prensa y de opinión.