"Narcopisos fuera, dos años con miedo. Aquí se trafica, ayúdennos, estamos desamparados. Nos insultan, nos amenazan, nuestros hijos tienen pánico". Grandes pancartas, de arriba a bajo en cinco pisos, cubrieron el jueves el emblemático edificio Jovellanos de Mieres. En la calle Aller, número 27, llevaban dos años viviendo "un infierno". Un presunto "narcopiso", en la cuarta planta, traía en jaque a todo el vecindario. Gritos de madrugada, sangre en el portal, la luz "pinchada" de la comunidad... Todo terminó el viernes, de madrugada. El presunto
Comentarios
Menudo infierno han pasado los vecinos y que triste el descontrol de la administración con el tema de los cuidados a personas dependientes, que también habrán pasado un calvario inhumano.
En casos tan fragantes, no se entiende que la policía no monte un dispositivo para comprobar que en efecto están traficando con droga. Una vez comprobado el tráfico, un juez debería de emitir una orden de arresto y así cerrar el narcopiso.
#2 En una casa que viví estuvimos varios años tragando, eran los dueños un minero jubilado muy joven.Trapicheo casi continuo, robaban lo que fuera, la gente con miedo.Era obvio: la policía y los jueces tocàndose los webs, una vergüenza, a los 4 años ya fue el juicio y el elemento tuvo una condena, ya me había ido. Eran los del piso de abajo.
Así funciona esto...