Una vez que rescatan a estos animales los llevan a la finca privada que Lonneke tiene en Cangas de Onís, donde tratan los problemas físicos que puedan padecer, como problemas en las pezuñas. «La mayoría tienen abandonados los cascos, cuando realmente necesitan un mantenimiento constante de los mismos, especialmente porque el clima de Asturias no es el más adecuado para ellos. Lo ideal sería un clima más seco y rocoso, con menos praderas de hierba fresca y menor humedad», aseguran. Para llevar a cabo esta labor, cuentan con el apoyo.
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Me ha dicho un amigo.
El matriarcado castrante decidiendo lo que es mejor para los animales ¿y si las pobres bestias lo único que quieren es follar y follar?
www.meneame.net/story/radiografia-riqueza-espana-687-000-euros-media-m