Un italiano que intentó robar una berenjena fue absuelto después de 9 años. El hombre estaba desempleado y intentó robar la berenjena para su hijo pero fue condenado a 5 meses de prisión y 300€ de multa, sentencia reducida en apelación a 2 meses y 120€ pero que fue considerada excesiva por su abogado de oficio que apeló.La alta corte le dio razón, criticó a los tribunales por no tener en cuenta la acusación tan liviana y deploró que los contribuyentes tuvieran que asumir los honorarios de los abogados y el tiempo perdido por los jueces.
Comentarios
Los ricos siempre dan más pena.
#2 Eso por no hablar del coste real del juicio por perseguir este tipo de ilícitos. Ese dinero podría haberse destinado a ayudar a este tipo, que si seguro que robó una berenjena es porque necesitaba comer.
Un sistema injusto lleva inevitablemente a una gestión desastrosa.
#3 por poder, podrían haber usado la pasta en comprarle un carro de berenjenas
#5 Un programa para reinsertarle en el mundo laboral, un curso que le formara y le ayudara a encontrar trabajo,...
Hay tantas cosas que se podían haber hecho con ese dinero.
Por otra parte los abogados y el juez (que se ocuparon de su caso) podrían estar ocupándose en las causas contra la corrupción y la mafia en Italia, problemas mucho más graves y con repercusiones sociales mucho mayores.
La berenjena debía ser concejal o subsecretario u obispo o algo, si no no de entiende.
Microbloggin y con faltas de ortografía.
Hostia, y porqué no robó un huevo kínder?
Eso le pasa por italiano.
En Sevilla han pillado robando aceitunas a unos pobres cacos que sólo llenan sus coches para poder alimentar a sus familias, lo que ocurre es que lo hacen a diario, y las roban a familias que también las necesitan para alimentar a sus familias. Todo tiene dos puntos de vista y todos los robos pueden ocultar una triste historia. Y no digamos de los pobres ladrones de aguacates en la Axarquía y en la Costa Tropical que además destrozan todo lo que pillan. Y ¿que daño hacen los que roban a las compañias eléctricas y plantan unos pocos cientos de plantas en los interiores de las casas o naves industriales, vendiendo sus productos a los que quieren comprarlos, ya que no obligan a nadie?.
Ultimamente se persigue incluso a transportistas honrados, que trabajan por sus familias, llegando a confiscarles sus lanchas y todoterrenos, una vergüenza.