El agente de la Policía de Chicago Jason Van Dyke, acusado del asesinato en 2014 de Laquan McDonald, declaró que descargó su arma contra el adolescente afroamericano de 17 años para que soltara el cuchillo que blandía. McDonald recibió 16 disparos del agente, algunos de ellos por la espalda
Comentarios
Será declarado INOCENTE
La culpa fué del chaval por ponerse en la trayectoria de las balas....
Acribillò, acribilló... joven, joven... negro, negro... tòdo es discutible !