Hace 4 años | Por gonas a elconfidencial.com
Publicado hace 4 años por gonas a elconfidencial.com

Hace alrededor de un lustro, el británico Peter Frankopan se convirtió en un superventas inopinado a pesar de que el tema de su ensayo no era particularmente propicio para un 'best seller'. O quizá por ello. 'El corazón del mundo' ofrecía “una nueva historia universal” que en lugar de partir desde Occidente, centraba su mirada más allá de Europa, en el amplio mundo que se extiende entre Oriente Medio y el mar de Ojostk.

Comentarios

D

Para no tener ninguna estrategia, bien que participó España en el Iron Wolf de la OTAN en Lituania hace poco.

R

Ni que la tuviéramos, cada vez pintamos menos en el mundo.

D

Pues que se pongan a conspirar y malmeter como han hecho siempre...

Arzak_

Tenemos el calor de nuestras playas y paellas

M

Europa no tiene ninguna estrategia... ¿o han decidido no contarsela a España?

m

europa empezará a tener estrategias tras el brexit, qué pena que no se vaya a dar nunca

letra

Catedrático de Oxford un idiota que lo primero que hace es vender spam tipo Xataka diciendo que en el "Single's Day" Ali Babá "ganó" mil millones de dólares en treinta segundos y diez mil millones en los primeros treinta minutos. Ni los ganó, ni en los primeros treinta segundos ni en toda la semana, ni posiblemente los facturó en todo el día. Pero es que el mercado interior de China, y su supuesta "clase media", tienen menos poder adquisitivo que el mercado alemán o el francés, por ejemplo y su economía depende al 90% de la terciarización de la occidental. O sea, son las multinacionales las que están financiando ese modelo y ese bloque político, e individuos como ese los que venden un relato falso para hacer digerible el cambio de paradigma mundial.

¿Sabe ese idiota en qué deberíamos en Occidente competir con China? En no tener un sistema académico basado en el espectáculo, los friki-estudios y los titulares karma whore que tienen como fin a más corto plazo conseguir financiación privada de cátedras y centros de estudios de cartón piedra. En China si un científico o un intelectual entregan datos falsos al Estado se van a tomar por saco. En Occidente, paradójicamente, los científicos e intelectuales son premiados por nutrir a la sociedad de información falsa, e incluso promocionados si su ignorancia beneficia a sus enemigos.