Nunca te lo cuentan en la facultad, y apenas se comenta fuera de ella. Nunca aparece en películas ni en programas televisivos sobre la enseñanza. Los profesores rara vez sacamos el tema. Lo más difícil de enseñar es lidiar con esto: Nunca hay suficiente. Nunca hay suficiente tiempo. Nunca hay recursos suficientes.
#4:
Me encanta mi profesión. Lo que no me encanta son los medios de que dispongo para ello. Altas ratios, pocos recursos materiales y tecnológicos, poco apoyo desde la administración (cuando no directamente nos tiran a los leones). Del sueldo y de las condiciones laborales, aunque hayan empeorado, no me debería quejar, pero lo hago para que no empeoren aún más. La principal sensación que tengo en este trabajo es que siempre vamos contracorriente, parcheando todos los desajustes que la misma sociedad produce y que curiosamente pretenden que la escuela por sí sola arregle.
Me encanta mi profesión. Lo que no me encanta son los medios de que dispongo para ello. Altas ratios, pocos recursos materiales y tecnológicos, poco apoyo desde la administración (cuando no directamente nos tiran a los leones). Del sueldo y de las condiciones laborales, aunque hayan empeorado, no me debería quejar, pero lo hago para que no empeoren aún más. La principal sensación que tengo en este trabajo es que siempre vamos contracorriente, parcheando todos los desajustes que la misma sociedad produce y que curiosamente pretenden que la escuela por sí sola arregle.
y de la calidad humana de la educación? Solo sabemos hablar de numeros. Las victimas son los alumnos y el primer resurso que les falta es que sus profesores les vean como lo que son.
No, compañero. La parte más difícil de ser profesor es ver que un alumno y su familia tienen problemas y no poder hacer nada o ver qué poco se puede hacer.
Los que tengan vocación a la enseñanza que se dediquen a ello sin problema. No hay muchos dispuestos a ponerse delante de 30 niños sanos y programar y evaluar durante un año.
Totalmente cierto, lo veo a diario en el colegio de mi hijo pero gracias a las ganas de los profesores de vocación se casi mantiene el equilibrio, pero en este gran gremio, para mí infravalorado por la población,he echado en falta mucha más implicación. Sabiendo que el sistema de educación es una locura legislatura tras legislatura porqué no han dado un golpe en la mesa de una vez. Tienen el poder para hacerlo.
Comentarios
Me encanta mi profesión. Lo que no me encanta son los medios de que dispongo para ello. Altas ratios, pocos recursos materiales y tecnológicos, poco apoyo desde la administración (cuando no directamente nos tiran a los leones). Del sueldo y de las condiciones laborales, aunque hayan empeorado, no me debería quejar, pero lo hago para que no empeoren aún más. La principal sensación que tengo en este trabajo es que siempre vamos contracorriente, parcheando todos los desajustes que la misma sociedad produce y que curiosamente pretenden que la escuela por sí sola arregle.
y de la calidad humana de la educación? Solo sabemos hablar de numeros. Las victimas son los alumnos y el primer resurso que les falta es que sus profesores les vean como lo que son.
No, compañero. La parte más difícil de ser profesor es ver que un alumno y su familia tienen problemas y no poder hacer nada o ver qué poco se puede hacer.
Para enseñar se necesita un profesor y un alumno, para aprender solo es necesario el alumno.
Los que tengan vocación a la enseñanza que se dediquen a ello sin problema. No hay muchos dispuestos a ponerse delante de 30 niños sanos y programar y evaluar durante un año.
#1 Sí, la profesión más dura del mundo, y mal pagada. Peor que trabajar en una mina de carbón, no me jodas.
Si suprimiéramos (o cambiáramos)el 90% de la programación televisiva, el trabajo del profesor sería algo más sencillo. Entre otras cosa, vale.
#2 Y el 90% del profesorado y el 90% de las materias y el 90% de los padres y el 90% de los objetivos...
Hay mucho 90% que cambiar
#3 No, compañero, en 90% del profesorado, no.
Influye tambien que en lugar de la bola de cristal, planeta imaginario o el kiosko, ven salvame, MHYV o mierdas por el estilo.
Eso sí, nosotros disfrutamos esta TV creativa y salimos igual de idiotas, de padefos y de borregos como generación.
Totalmente cierto, lo veo a diario en el colegio de mi hijo pero gracias a las ganas de los profesores de vocación se casi mantiene el equilibrio, pero en este gran gremio, para mí infravalorado por la población,he echado en falta mucha más implicación. Sabiendo que el sistema de educación es una locura legislatura tras legislatura porqué no han dado un golpe en la mesa de una vez. Tienen el poder para hacerlo.