Las cosas que parecen frágiles y bellas serán las primeras en desaparecer. Piensa en el canario y la cueva, en el gas y la mina. Cae el magnífico pájaro y empieza la estampida… Huyen todos porque es el aviso del escape, la muerte. Quiero presentaros un curioso atolón, un hermosísimo canario tropical, anillo de tierra que se levanta apenas un metro sobre la superficie del mar Pacífico. Una isla maravilla que parece salida de una fantasía pirata y que tiene un problema. Como le ocurría al pájaro minero, ha comenzado a toser arena.
Comentarios
Supongo que el poco más de medio millar de personas que vive en ese atolón no le importará mucho a nadie, ni tendrán recursos para intentar evitar que la rápida subida del nivel del mar sumerja su hogar.
Porque si importasen, seguramente ya se estarían llevando materiales (desde escombros a simple arena dragada cerca) a ese atolón, para aumentar su altura.
Los atolones de coral existen porque el nivel del mar sube. Difícilmente aquello que los crea puede hacer que desaparezcan. Se sabe desde Darwin.
Un buen artículo periodístico que no desbordase sensacionalismo sentimentalista barato por sus cuatro costados nos habría contado, al menos, si la isla ha crecido o ha menguado en el último siglo. Con datos. Pero se ve que es mucho pedir.
¡Qué poético el periodista! deja ese trabajo de mierda y escribe poemas, coño. Romanticote, que eres un romanticote como un camión. Yo sé reconocer a un buen poeta aunque esté a tomar por culo de lejos. Y tú eres un poetazo como la copa de un pino. ¡¡¡POETÓN!!!