Luis Argüello ha calificado de «reprobable» el cántico con «elogio» a la «violencia» entonado por Antonio Martín, que tiene una «responsabilidad añadida» por su cargo. "también creo que hay que poner las cosas en su contexto, es decir, que conociendo lo que es las fiestas de muchos pueblos, conociendo lo que pasa a altas horas de la madrugada después de haber bebido esto o lo otro, hay que situarlo en ese contexto"
#1 A ver, que la canción habla de violar una niña, no es tan grave, al menos habrá nacido. Imagínate una canción hablando de abortar, eso sí sería pecado mortal.
Igual sus palabras serían otras si supiera que esa misma canción, en algunas zonas, tiene una introducción como si todas esas acciones fueran realizadas por religiosos, como sátira y denuncia un tanto macabra de los abusos en la iglesia...
Comentarios
Qué permisivos son cuando hay menores de por medio y que duros cuando las relaciones son entre adultos responsables con consentimiento..
#1 A ver, que la canción habla de violar una niña, no es tan grave, al menos habrá nacido. Imagínate una canción hablando de abortar, eso sí sería pecado mortal.
Bueno, de abusar de menores no se van a escandalizar ellos.
Igual sus palabras serían otras si supiera que esa misma canción, en algunas zonas, tiene una introducción como si todas esas acciones fueran realizadas por religiosos, como sátira y denuncia un tanto macabra de los abusos en la iglesia...
Que ponga esta canción en su contexto.
Si los curas y frailes supieran
La paliza que les vamos a dar
Subirían al púlpito cantando
Libertad, libertad, libertad.
#5 Me encontré un niño solo en la clasecita
le cogí de la manita
y me lo llevé a la sacristía
le bajé el pantaloncito
y le bajé el gayumbito
El arzobispo la escuchó y se le puso más dura que el báculo arzobispal.
En contexto, cantar a la aniquilación de la iglesia y los que la componen seguramente también sea aceptable ...
No justifico tal, peeeeeeerooo....
En resumen: dejad al chaval, rojos
El contexto es que con alcohol haces lo que te gustaría hacer si no hubiera consecuencias
Es que no hay día que no me recuerden aquello de las tripas de Diderot!