Hace 4 años | Por bonobo a nationalgeographic.es
Publicado hace 4 años por bonobo a nationalgeographic.es

A las más de ocho millones de toneladas de residuos plásticos que arrojamos al mar cada año se suma de pronto una nueva fuente de contaminación: los millones de guantes y mascarillas que plagan cada rincón del planeta para protegernos de la COVID-19.

Comentarios

Magog

Si yo, que vivo en la meseta, tiro las basuras donde corresponde ¿Cómo cojones gestionan mis residuos para que lleguen al puto mar?

baronrampante

#6 Me has ahorrado un comentario.

ContinuumST

#6 Y encima nos quieren hacer pasar por culpables a los que intentamos hacerlo bien... si es que... No tengo palabras. Bueno, sí, pero...

D

#6. Si tuvieras que pagar un euro más por mascarilla para la gestión como las bolsas del super... te quitarían ese sentimiento de culpa y llegarían al mismo sitio.

i

Esto se arregla fácil. El gobierno saca una ley para que los peces las lleven obligatoriamente. Así, además de acabar antes con el stock, se aprovecha para añadir otra subnormalidad a la nueva normalidad.

andran

Lo mejor que le podía pasar al planeta es que el ser humano se extinguiese como especie.

o

increible lo egoista q es la gente y lo poco preocupada con el medio ambiente

Democrito

¿Por qué hay tanto guarro en el mundo?
En el bar de mi calle ahora atienden por una ventana para servir cafés, y está la calle llena de sobrecitos de azúcar.

Res_cogitans

#1 Es egoísmo e incluso desprecio hacia lo que compartimos todos. Muchos guarros en la calle tiene su casa reluciente.