Ahora que Hong Kong ha logrado erradicar casi por completo los contagios locales, la preocupación está en los que llegan del extranjero, todos los que hayan pasado por ciertos países están obligados a respetar una cuarentena de 14 días. Hong Kong ha prohibido la entrada de turistas o su tránsito por el aeropuerto a partir del miércoles, e impone la reclusión de dos semanas al resto. Para que no se la salten, el gobierno de la excolonia británica ha desarrollado una pulsera de localización que deben llevar todos los llegados del extranjero.
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Voy a pedir dos para el matrimonio Aznar-Botella