Hace 7 años | Por bonobo a vozpopuli.com
Publicado hace 7 años por bonobo a vozpopuli.com

Zarzuela le gana el pulso a Exteriores. El criterio del Rey se impone a la postura de Margallo. Don Felipe no asistirá a la firma de la 'paz colombiana' entre el Gobierno de Santos y la guerilla de las FARC. Mariano Rajoy, que tampoco viajará al acto dado que tiene lugar un día después de las elecciones gallegas y vascas, parecía respaldar a Margallo en esta tesitura. Una postura que le chirriaba a algunos miembros del su propio Ejecutivo, como al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, por el incómodo paralelismo con el caso de ETA

Comentarios

O

#1 Ante un enemigo como las FARC no cabe otra alternativa que su destrucción total. El "proceso de paz" que está llevando a cabo el estado colombiano es un abajada de pantalones en toda regla: van a dejarles montar un partido político al que GARANTIZARÁN una representación de 5 diputados aunque en las elecciones no los saquen. Además, en el referéndum que van a organizar para refrendar el acuerdo, para que gane el sí es suficiente con que lo apoye SÓLO un 13% del censo. No tiene ni pies ni cabeza. Con estas acciones no se hace más que legitimar el terrorismo como arma política

O

#8 Pero es que algunas concesiones son inadmisibles. La de que tengan diputados mínimos fijos, aunque no los consigan, es para llorar. Y ya lo del umbral del 13% del censo electoral para el "sí" en el referéndum no tienen nombre, cosa que trapichearon modificando la ley anterior, que decía que era necesaria la mayoría del del censo electoral (http://www.eltiempo.com/politica/proceso-de-paz/plebiscito-para-la-paz-umbral-de-aprobacion/16428158). Apesta, han elegido ese 13% para asegurarse la victoria, y además holgada; capaces serán de decir si el sí gana con, por ejemplo, el 30%, que el acuerdo fue refrendado por mayoría aplastante (y a saber lo que sale, porque hay encuestas para todos los gustos: http://www.publimetro.co/colombia/encuesta-de-votacion-al-plebiscito-por-la-paz/lmkpha!KIhLDFyj7nQE/, http://www.informador.com.mx/internacional/2016/675939/6/el-no-ganaria-en-referendo-sobre-proceso-de-paz-en-colombia.htm)

ElPerroDeLosCinco

#10 Tienes toda la razón. En realidad cualquier concesión debería ser inadmisible, pero a veces en la vida tienes que elegir el menor de dos males, y este (mal) acuerdo es preferible a seguir la guerra. Creo que han hecho bien en aceptarlo, lo que no me gusta es que se presente como algo positivo y se intente celebrar con presencia de mandatarios internacionales y toda la parafernalia, como si fuera un éxito.

O

#13 Bueno, no tiene por qué ser inadmisible toda concesión, ya que habrá individuos que han tenido más o menos responsabilidad en la guerrilla, con delitos de sangre o sin ellos, etc. Pero por la información que llega hay cosas en el acuerdo que hacen sentir vergüenza. Creo también que en Colombia queda algún grupo terrorista más (las FARC son el mayor), a los cuales no sé cómo les afecta este proceso

GatoMaula

#14 El 13% del censo electoral, no es igual que el 13% de los votos válidos. En España vendrán a ser como unos 5.000.000 de votos, es decir una cifra similar, más o menos, a los votos que ha sacado el Psoe o Podemos, algo superior a los de C´s y algo inferior a la que ha sacado el PP.

Ahora ya puedes seguir rasgándote las vestiduras, por lo que hagan en otros paises, que aquí seguimos tan pichis.

O

#24 Claro, del censo electoral, no he dicho otra cosa en mis comentarios anteriores. Y la norma modificada decía que para que un referéndum saliera adelante hacía falta la mayoría también del censo. O sea, que han bajado del 50.1% al 13%

GatoMaula

#26 Normal, aquí el PP ha gobernado con mayoría absoluta sin llegar al 20% del censo, pero por mí puedes seguir haciéndote trampas procentuales.

O

#29 Elecciones en España con mayoría absoluta en el congreso de los diputados:

1982 (PSOE): 37.7% del censo electoral (https://es.wikipedia.org/wiki/Elecciones_generales_de_Espa%C3%B1a_de_1982)
1986 (PSOE): 30.6% del censo electoral (https://es.wikipedia.org/wiki/Elecciones_generales_de_Espa%C3%B1a_de_1986)
2000 (PP): 30.4% del censo electoral (https://es.wikipedia.org/wiki/Elecciones_generales_de_Espa%C3%B1a_de_2000)
2011 (PP): 30.4% del censo electoral (https://es.wikipedia.org/wiki/Elecciones_generales_de_Espa%C3%B1a_de_2011)

Ahora sigue diciendo mentiras e inventándote las cifras. Por no hablar de que estás comparando un referéndum de dos opsiones (sí/no) con unas elecciones legislativas con múltiples alternativas políticas

GatoMaula

#32 No te has dado cuenta de que he usado cifras redondas? O sea que no pretendía ser riguroso con las matemáticas, sino pedagógico con la política, pero en fin... Según tu último enlace el PP ha gobernado con mayoría absoluta sacando 11000000 de votos sobre una población de 47000000, como te veo espeso te lo aclaro, imponiendo, a los otros 36000000, lo que os haya salido de los huevos a ti y a tus 109999999 coleguitas.

Cansinos sois los demócratas de toda la vida

O

#34 Me descojono, ¿pero no estábamos hablando de censo electoral? ¿Crees que el censo electoral es la población total? Creo que no tienes claros algunos conceptos. Y, bueno, que 20 sea una cifra redonda de 30... Ríete tú del redondeo del euro
Y te repito que no se puede comparar un referéndum con unas elecciones a cortes generales

GatoMaula

#35 No, no estábamos hablando del censo, estábamoa hablando de rasgarse las vestiduras al comparar lo que hacen en otros paises que luego resulta que no se pueden comparar... eso si es para descojonarse.
Si es que os desenmascaráis vosotros solos.

O

#36 Claro, claro, no estábamos hablando del censo:

Tu #29: Normal, aquí el PP ha gobernado con mayoría absoluta sin llegar al 20% del censo, pero por mí puedes seguir haciéndote trampas procentuales. y etc., etc.

GatoMaula

#37 El censo lo has sacado tu buscando una excusa para camuflar tu sectarismo. Y sí, si te gusta, pudes seguir autoengañándote con datos porcentuales, pero recuerda que no tienen propiedad conmutativa, como tus lamentos por còmo solucionan sus problemas en todo el mundo, pudiendo dejar que se metastasicen como tan firmemente hacéis aquí.

Eres tan patético que no me voy a molestar ni en devolverte los negativos que me has cascao, incumpliendo la normativa de MNM para el voto negativo, por cierto.

O

#38 Bueno, te he votado negativo porque varios de tus comentarios son mentira

GatoMaula

#39 Núnca he prtendido que fueran "verdades absolutas", sino como paradigma de lo inconsistente de tus fobias. Ergo, no son mentira.

O

#40 Menudo cencerro estás hecho

GatoMaula

#41 Ya, ya te entiendo, menos mal que no eres musulmán, o sí? por que tienes la misma dialéctica que un yihadista, fenómeno.

O

#42 Tómate la medicación, anda, que ya son las 16:00

GatoMaula

#43 Augh... ahora sí que me has matao... Qué ingénio, qué clase, qué original... llorica.

j

#5 el 13% es la votación mínima que debe conseguir el si para que sea aprobado, osea, si llegaran solo a votar 8 millones de personas y 4.300.000 votaran si aunque fueran mayoría no valdrían dichas votaciones ya que necesita llegar a un mínimo de votos a favor, la votación se define por la mitad más 1 de los votos, además de ganar el si necesita una votación mínima de 4’396.626 votos para ser valida.

D

#1 Que sí, que ya sabemos que ningún caso internacional es comparable a nada que esté sucediendo en España
Tú mismo te respondes. El caso de Escocia es absolutamente incomparable con el de ninguna Comunidad Autónoma española.

O

#7 Pero es que es el único clavo ardiendo al que pueden agarrarse los independentistas

GatoMaula

#23 Pero es que, según #7 y #9, es absolutamente incomparable.

ikatza

#7 Claro claro, de ahí que Rajoy sorprendiera a propios y extraños corriendo a oponerse en los términos más duros al dialogo UE-Escocia tras el Brexit (gobierno-espanol-tan-vehemente-contra-entrada-escocia-ue-ale), porque estaba muy tranquilo lol

D

#12 Rajoy sabe perfectamente que ninguna Comunidad Autonoma española cumple con los requisitos de autodeterminación que contempla de los Pactos Internacionales de Derechos Humanos.
Si lo hizo, seguramente, fue para tratar de evitar a los tontos de siempre que desconocen totalmente esa situación.

O

#15 Buenooo, nuestros independentistas asumen que sí que hay un punto de ese pacto que los debería amparar: el colonialismo. Viven (y vivirán) en el delirio de que sus comunidades eran en el pretérito una Arcadia feliz e independiente que la pérfida España invadió y sometió

D

#20 el colonialismo
lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol lol

m

#7 ya bueno, lo mismo puede decirse al reves, por ejemplo el temas vasco es incomparable a cualquier lugar de Europa, al final no hay nunca dos situaciones politicas iguales

D

#17 En efecto, porque, de entrada, la Comunidad Autónoma vasca debería pertenecer a la Navarra.

D

#1 Cada noche antes de dormir un montón de miembros de algunos grandes partidos de este país recuerdan con añoranza los tiempos en los que sus peones en ayuntamientos de cuarta eran asesinados y ellos podían colgarse las medallas de mártires.

¿Paz? lo que mejor les viene a algunos es la guerra.

D

#3 El rey no puede desdecir a los mismistros.
Esto se trata de una campaña para defender a un nuevo campechano.

j

#45 Y se basa en una columna escrita por Godofredo Cinico Caspa Plinio Apuleyo Mendoza, ultimo "bastión de la moralidad y la decencia".

D

#27 La verdad es que eso es profundamente criticable e injusto ¿el resto? medidas para integrarlos en la vida política, lo demás son lloros porque pueden ganar.

O

#28 El resto es igual de criticable, empezando porque gente con delitos de sangre va a librarse de la cárcel y entrar en la vida política. Por no hablar del tema de la droga

D

#30 La vida política colombiana estuvo y está llena de gente con las manos manchas de sangre ¿o acaso las autodefensas eran grupos descontrolados sin ninguna vinculación con el estado?

Yo no le daría poder político a nadie con las manos sucias, pero ya lo tienen.

O

#31 Pues claro, igual que aquí con el GAL, pero eso no implica que este acuerdo sea algo bueno

O

El acuerdo final suscrito por el Gobierno y las Farc será sometido a consideración de los colombianos en un plebiscito que tendrá lugar el próximo 2 de octubre. Abarca 297 páginas que muy pocos han tenido la paciencia de leer. Son densas, abordan temas muy complejos y a veces resultan nada claras para el ciudadano común. No obstante, sin tener un real conocimiento del acuerdo, el elector se encontrará a la hora de votar con una pregunta para la cual solo existen dos opciones: un sí o un no. Redactada con su conocida astucia de hábil jugador de póquer por el presidente Santos, la pregunta dice así: "¿Apoya usted el acuerdo final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera?". A cualquier observador extranjero el voto por el no debe de resultarle exótico, incomprensible, como si su depositario fuese amigo de la guerra.

Por cierto, este es el camino que sigue la estruendosa propaganda oficial. Su lema "Sí a la paz, no a la guerra" invade no solo todos los medios de comunicación, sino también ventanas y edificios con carteles con la seráfica imagen de una paloma. En la televisión y la radio se pregunta a los colombianos si desean el fin del secuestro, de la extorsión, de los atentados, del reclutamiento de menores y de otras tantas acciones que desde hace más de cincuenta años vienen asolando el país.

Sin duda, el acuerdo logrado en La Habana –y los alardes publicitarios que lo acompañan– puede alcanzar un efecto positivo en el ámbito internacional y también en electores rasos de Colombia, especialmente en las zonas rurales que por largo tiempo han vivido bajo la constante amenaza de las Farc.

Ahora bien, ¿cuáles son las razones de quienes se proponen votar no en el plebiscito? Conviene mirarlas con detenimiento. De un lado, obedecen a una realidad que el Gobierno tuvo que maquillar o pasar por alto para abrir el diálogo con las Farc y aceptar sus exigencias. De otra parte, el sombrío porvenir que muchos de los acuerdos tienen para el inmediato futuro de Colombia.

En busca de esa realidad escamoteada, debemos volver atrás, a los primeros años de este siglo, cuando el entonces presidente Álvaro Uribe Vélez puso en marcha su política de Seguridad Democrática para combatir, al fin con mano firme, a las guerrillas y a las Autodefensas Campesinas o paramilitares. Dos experiencias del gobierno de Andrés Pastrana le sirvieron para trazar esta nueva ruta de acción. La primera fue el fracaso de los diálogos del Caguán, que mostraron la manera cómo, gracias a la concesión de un territorio, las Farc extendieron su poder militar en muchas zonas del país. La segunda fue el apoyo logístico que obtuvo Pastrana de los Estados Unidos con el Plan Colombia, apoyo que permitió un mejor acceso aéreo a las regiones donde las Farc tenían sus campamentos.

Los resultados de Uribe fueron innegables. Desalojadas de muchas zonas que antes controlaban, dados de baja sus principales cabecillas (Raúl Reyes, el Mono Jojoy, Alfonso Cano) o detenidos y extraditados como Simón Trinidad, liberada del secuestro la famosa Íngrid Betancourt y desmovilizados 52.000 integrantes de paramilitares y guerrillas, las Farc por primera vez fueron diezmadas y obligadas a considerar imposible la toma del poder por las armas. Ninguno de sus campamentos estaba seguro.

El objetivo último de Uribe Vélez era lograr con ellas, como había ocurrido con los paramilitares, que aceptaran un sometimiento a la justicia a cambio de que solo pagaran ocho años de cárcel por los delitos cometidos. Pensaba que este último objetivo iba a realizarlo Juan Manuel Santos, su ministro de Defensa, quien logró ganar las elecciones presidenciales de 2010 gracias a su apoyo.

Como es bien sabido, desde el primer día de su gobierno Santos no quiso aparecer como el continuador de la política de Uribe. Al contrario, marcó rotundas diferencias con quien había facilitado su triunfo. Se acercó a Chávez llamándolo su "nuevo mejor amigo". Y en vez de continuar asediando a las Farc con fuertes operaciones militares, abrió secretas conversaciones con sus comandantes. Dos factores lo movieron a ello. El primero, las vanidades de su ego. El segundo, un cambio en la estrategia de las Farc.

Chávez convenció al entonces comandante supremo de las Farc, Alfonso Cano, de que ya no era viable en el continente llegar al poder por las armas, como lo consagraba la cartilla castrista. Era factible aprovechar el descontento de las clases marginales para lograr un triunfo electoral y una vez en el poder poner en marcha su proyecto revolucionario, identificado con el socialismo del siglo XXI.

Sin dudarlo, bajo esta sugerencia, Cano creó varias iniciativas: el llamado Plan Renacer, que implicaba un regreso a la guerra de guerrillas, la disminución del número de efectivos, la suspensión de combates abiertos con las Fuerzas Militares, la formación de un movimiento político y la infiltración de milicianos clandestinos en la justicia, los sindicatos, las universidades, las comunidades indígenas y afrodescendientes y, algo de suma importancia, los medios de comunicación. Dentro de esta nueva estrategia, buscó contactos confidenciales con Juan Manuel Santos para iniciar negociaciones.

Para hacer efectiva esta propuesta, Santos no tuvo inconveniente en bautizar como conflicto armado lo que bajo el gobierno de Álvaro Uribe era una abierta lucha contra el terrorismo. Pasó por alto con esta denominación el prontuario criminal de las Farc, que condenaba a sus máximos líderes a un total de 1.629 años de prisión por cuenta de 27.000 secuestros, 25.000 desaparecidos y seis millones de desplazados. De igual manera, pasó por alto también que las Farc se habían convertido en el tercer cartel mundial del narcotráfico, con ingresos de 600 millones de dólares al año. Escogió como intermediarios en este proceso de negociación a los gobiernos de Cuba y Venezuela, que comparten la ideología marxista de las Farc, y no vaciló en elegir como sede de los diálogos La Habana.

En síntesis, el hecho de haber definido a las Farc como uno de los actores del conflicto, colocándolas en pie de igualdad con el Estado, es una de las primeras razones que han movido a un creciente número de colombianos a votar no en el plebiscito. Las primeras, pero no las únicas.
Peligrosas concesiones

Luego de cuatro años de negociaciones, muchos de los puntos contenidos en el Acuerdo Final representan concesiones inaceptables a las Farcy riesgos muy grandes que ensombrecen el futuro del país. El primero de ellos es la impunidad, pues el acuerdo admite que los miembros de la guerrilla quedan eximidos del pago de cárcel por los delitos cometidos. Solo tendrán una temporal restricción de la libertad en zonas previamente acordadas donde realizarán "trabajos, obras o actividades reparadoras y restaurativas, programas de protección del medio ambiente, de desarrollo rural, de eliminación de residuos o reparación de infraestructura". La supuesta restricción de la libertad a que serán sometidas las Farc no les impedirá ocupar curules en el Congreso de la República. No sobra señalar que mientras las Farc reciben este beneficioso trato, los militares retirados que están siendo investigados o ya fueron condenados (muchos de ellos injustamente) se mantienen en centros de reclusión militar.

La aplicación de la justicia transicional convenida con las Farc plantea varias dudas sobre su funcionamiento y la selección de jueces que tendrán fueros no contemplados en la Constitución. La denominada Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) será conformada por instancias extranjeras y tendrá facultades y poderes que sobrepasan los de las Altas Cortes, juzgados y tribunales del país. La Fiscalía General, la Procuraduría y la Contraloría pierden sus atribuciones penales, y sus decisiones en cualquier época pueden ser revisadas e incluso anuladas. Los fallos de la Jurisdicción Especial para la Paz serán inapelables y no admitirán doble instancia. Hay, pues, muchas inquietudes y temores de que esta clase de justicia proceda con abierta parcialidad.

El narcotráfico, calificado como delito conexo al de rebelión, seguirá convertido en un millonario recurso para las Farc una vez se constituyan como partido político. En efecto, la decisión del gobierno de Santos de suspender la fumigación con glifosfato de los extensos cultivos de coca ha producido un considerable aumento de estos en los últimos dos años. Hoy cubren nada menos que 170.000 hectáreas, ello sin contar que las Farc no confiesan ser narcotraficantes y por tal motivo declaran no tener recursos para resarcir a sus víctimas.

Sorprenden otros beneficios otorgados a las Farc. El Acuerdo Final establece para sus líderes diez curules directas en el Congreso durante ocho años sin necesidad de votos. Además de las que ya tienen movimientos políticos de cercana orientación ideológica, habrá 16 más en la Cámara de Representantes por cuenta de unas circunscripciones especiales de paz ubicadas en áreas donde las Farc han tenido una presencia dominante. El futuro partido político creado por ellas recibirá el diez por ciento de los recursos que el Estado destina a todos los partidos políticos. Además de un cinco por ciento adicional para financiar la mejor difusión de su plataforma ideológica, tendrán acceso a 31 emisoras de radio y a un nuevo canal de televisión. Parece increíble que después de cincuenta años de acciones terroristas las Farc reciban estos beneficios, nunca antes concedidos a partido político alguno.

La reforma rural integral contemplada en el acuerdo supone crear un fondo de tierras de distribución gratuita y de carácter permanente. Solicitada por las Farc, suscita inquietudes por varias razones. Se practica sobre las llamadas tierras insuficientes, sin que se explique el alcance de este término. Los expertos aseguran que la creación de un fondo de tierras con subsidios y créditos va a generar inmensos costos para la economía nacional. El otro tema que inquieta es que muchas de estas

O

La reforma rural integral contemplada en el acuerdo supone crear un fondo de tierras de distribución gratuita y de carácter permanente. Solicitada por las Farc, suscita inquietudes por varias razones. Se practica sobre las llamadas tierras insuficientes, sin que se explique el alcance de este término. Los expertos aseguran que la creación de un fondo de tierras con subsidios y créditos va a generar inmensos costos para la economía nacional. El otro tema que inquieta es que muchas de estas tierras van a quedar en manos de comunidades agrarias creadas o influidas por las Farc.

Lo que queda claro del Acuerdo Final es que a las Farc se les han atendido todas sus exigencias, con el chantaje de que sin ellas no llegaría a buen término el proceso de paz. En realidad, su aspiración no es la paz como tal, sino un nuevo punto de partida para llegar al poder por la vía electoral y, una vez alcanzado, consolidar el proyecto revolucionario tal como lo hicieron en el continente Maduro, Correa, Evo Morales y Daniel Ortega con la complicidad de los Castro.

Desde luego, para las elecciones presidenciales de 2018 no van a postular un candidato propio, teniendo en cuenta la baja favorabilidad que tienen en el país. Su nueva estrategia está encaminada, como bien lo dice su asesor, el jurista español Enrique Santiago, "a la reconformación de la izquierda y a la unidad de los movimientos de progreso antineoliberales como ha pasado en otros países de América Latina". He aquí el riesgo que se nos presenta. Aunque en este país la gran mayoría es consciente del terrible desastre que produjo el chavismo en Venezuela, es cierto también que un fenómeno como el vivido por el país hermano en 1998 se puede deslizar sigilosamente en Colombia.

La corrupción que invade el mundo político, el descontento que va a producir una voraz reforma tributaria –que afectará a la mayoría de los colombianos–, la crisis en la salud y la administración de justicia se harán sentir, y como como consecuencia de todo ello pueden abrirle el paso a una opción totalmente diferente y lograr que una izquierda dentro de la cual se ubicará el partido político de las Farc recoja el creciente descontento que se empieza a sentir en lo que podríamos llamar el elector raso.

Debe tenerse en cuenta que el sueño de la paz, fervorosamente pregonado por la propaganda oficial y acatado por quienes votarán sí en el plebiscito, se derrumbará cuando en reemplazo de las Farc y con el sustento del narcotráfico, el Eln, el Epl y las llamadas Bacrim (bandas criminales) ocupen su lugar con las mismas acciones terroristas. Dueños de las 29 vastas zonas de concentración, comandantes de las Farc, libres de cualquier control y con mucho dinero en su poder, tendrán a su cargo la movilización campesina por primera vez con fines electorales.

Este es el inquietante panorama que se advierte en Colombia a raíz del Acuerdo Final que se firmará en Cartagena el 26 de septiembre. El engaño está sobre la mesa. El sueño de la paz puede convertirse en una pesadilla.

D

#18 Las FARC recibirán financiación y empezarán a difundir su propaganda política, se les garantizarán puestos en la Cámara de Representantes y pueden llegar a ganar las elecciones.

¿Utilización de medios de comunicación como palanca para obtener réditos políticos? ¡Qué escándalo!
¿Financiación sospechosa enraizada con actividades criminales? ¡Qué me dice!
¿Voto coaccionado? ¡Vergonzoso!
¿Infiltración de individuos con agenda política en la estructura del estado? ¡Intolerable!

Buen resumen del pan nuestro de cada día en la vida política de América Latina. Claro que aquí el problema no es el qué ni el cómo sino el quién.

La gente puede terminar votando mal, horror.

O

#23 Sí, escándalo, horror y error es que se les garanticen diputados mínimos (no sé si 5 o 10) aunque no los ganen en las urnas

P

#27 ¿Más horrible que continuar una guerra de 60 años que le ha costado a Colombia 220 mil muertos? Háztelo mirar.

j

#18 En serio trae un articulo escrito por Plinio? el personaje que inspiro a Jaime Garzon para crear a Godofredo Cinico Caspa



EN fin, la idea que tienen unos es la de confundir... Creí que lo que escribía usted más arriba era un poco de propaganda Uribista que le habían colado, pero no, lo que veo es que está tratando de colar cosas sacadas de contexto.

Frederic_Bourdin

Veremos a quién da la razón la historia pero la posición del ministro se me antoja más sensata.