Él era un matemático que trabajaba en seguros y ella, una topógrafa del Reino Unido. Pero desde hace dos años, Natalia Virdee (41) y Joshua Sleith (27) dejaron sus trabajos para convertirse en “coach de sexo”. La pareja cobra cien euros por hora para dar lecciones de sexualidad y permitir que las personas desbloqueen sus fantasías ocultas; sin embargo, insisten en que no se dedican a la prostitución.
Comentarios
"Insisten en que no se dedican a la prostitución", claro, claro... Que paguen la cuota de autónomo, hombre ya...
Las excusas que se busca la gente
Mucho vicio es lo que hay.
Los políticos no cobran ya bastante por jodernos? Competencia desleal.