Las instalaciones, que estaban en fase de construcción, fueron saqueadas y quemadas por decenas de personas. El motivo de los disturbios, sorprendentemente, era el temor a ser contagiados por la proximidad de dichas instalaciones. En las redes sociales corrió como la pólvora la llamada a destruir el centro de test de COVID-19, esgrimiendo como argumento que estaba demasiado cerca de los hogares. En dichas publicaciones se calificaba dicha cercanía como «sinónimo de muerte» para los habitantes.
Comentarios
La inteligencia de la turba es igual a la del menos inteligente de la turba.
#3 cuanto más turba, peor
#3 Y seguro que encima es el que manda.
Joder con los bulos.
El siguiente paso es quemar centros de salud y hospitales , todo muy coherente .
#4 Ojos que no ve...
Por lo visto, en África también hay voxemitas.
En los países ricos la turba está en las redes sociales y las cuñadonoticias que reenvían a lo loco.
Es como quien no va al hospital por si se contagia de algo chungo pero eso de destruir el centro...