Algunos peces pueden reconocer sus propios rostros en fotos y espejos, una habilidad que generalmente se atribuye a los humanos y a otros animales considerados particularmente inteligentes, según una nueva investigación. Descubrir esta habilidad en los peces sugiere que la autoconsciencia puede estar mucho más extendida entre los animales de lo que se pensaba hasta ahora, según los autores de este estudio, cuyos resultados se publican en Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS).
Comentarios
El meneante medio, por el contrario, es incapaz de reconocerse el 60% de las veces.
Ahora añade que, según los estudios que se han realizado, la mayoría de los humanos es incapaz de reconocer si un brazo de plástico es su propio brazo. Simplemente con ponerlo en la misma posición y darle unos cuantos toques sincronizados, casi todo el mundo cae en la trampa.
Pero oye, que autoconsciencia debe ser reconocer el propio rostro, no el propio brazo.
La inteligencia es un concepto totalmente inventado por los humanos. No tan diferente a la idea de Dios.
Quizá en el futuro tendremos que replantearnos la cuestión de la inteligencia y, sobre todo, sus resultados. El homo sapiens está en la cúspide de la cadena trófica por su inteligencia y se va a ir al carajo por su estupidez
#1 Aún no hay nada claro en cuanto a la "inteligencia". Los test de inteligencia suelen recoger patrones culturales, no son válidos. Llevo desactualizado de la cuestión en su forma más concreta alguna que otra década, pero sigo considerando la inteligencia en cuanto la capacidad de resolver problemas como su definición más ajustada. Ahora bien, ¿qué es un problema? Reflexionando sobre esta última cuestión, surgen varios puntos de partida... Indagando sobre algunos de ellos podemos llegar a conclusiones atroces, como por ejemplo la inteligencia militar. Así que el problema es mejor dejarlo de lado mientras no haya una capacidad horizontal comunicativa que nos permita evaluar el problema como conjunto social. Tras lo cual solo nos queda la inteligencia personal que soluciona problemas personales (lo cual también puede llegar a ser muy atroz, pero si se ejecuta con cierta inteligencia al mismo tiempo eficiente).
En último término nos queda la reflexión ético-moral sobre la misma... que vendría a ser como una cuchara. La inteligencia es como una cuchara, puedes comer, puedes cavar o puedes matar lenta o violentamente a cualquier persona.
La inteligencia es una cuchara, he dicho.