Las benzodiacepinas se prescriben para enfermedades que suelen ser de muy larga duración por lo que se toman durante períodos muy largos de tiempo, hablamos de años en algunos casos, mientras los que aparece la dependencia.
Normalmente, los pacientes no tienen porqué aumentar la dosis, pero tomar estas pastillas durante tanto tiempo puede originar no sólo problemas de dependencia, sino déficits cognitivos que perduran incluso después de finalizar su consumo.
Las benzodiacepinas tienen capacidad de reforzamiento y por lo tanto pueden crear adicción además de dependencia.
El síndrome de abstinencia de las benzodiacepinas es la principal razón que dificulta acabar con el consumo de estas pastillas. Algunos de los factores que pueden agravar el síndrome de abstinencia son el tiempo de consumo y la dosis, cuanto mayor sean estos, más grave el síndrome y más difícil dejarlas.
Comentarios
#0 deja el spam
punta_de_flecha
@admin dadle metadona.
#4 No me decepcionas, la gente no sabe cosas...
#0 Espero ansioso tu próximo artículo con grandes revelaciones, el fuego quema, el agua moja...
#2 sorprende ver la cantidad de personas que no son conscientes de que las benzodiacepinas son una droga, legal, que prescriben los médicos con receta, pero una droga, de la que resulta muy difícil salir cuando ya hay una adicción asociada.
Tres cervezas y asunto arreglado.
#3 y lo mismo ocurre con el alcohol