Hace 1 año | Por themarquesito a politico.com
Publicado hace 1 año por themarquesito a politico.com

El caso, Estados Unidos contra Sullivan, sirvió de base para que el gobierno condenara en 1931 a Al Capone, que dirigía un sindicato del crimen de la época de la Ley Seca con sede en Chicago, por evasión del impuesto sobre la renta y lo enviara durante ocho años a la entonces nueva prisión federal de Alcatraz. El tribunal rechazó el argumento de que la V Enmienda de la Constitución, que protege a las personas de la autoincriminación, absolvía al acusado, un contrabandista llamado Manley Sullivan, de tener que presentar la declaración de renta.

Comentarios

themarquesito

Lo mejor de ese caso es este otro comentario de Holmes, ponente de la sentencia:
Se insiste en que, si se hiciera una declaración, el acusado tendría derecho a deducir gastos ilegales, como el soborno. Esto no se deduce en absoluto, pero ya habrá tiempo de considerar la cuestión cuando un contribuyente tenga la temeridad de plantearla.

Juristas cachondos de esos que le gustarían aPasaPolloPasaPollo oskaworldskaworld

PasaPollo

#1 Holmes es mi juez americano favorito. Recuerdo que en Teoría del Derecho de primer curso le tenía un poco de rabia al realismo jurídico (tanto norteamericano como escandinavo), pero en Filosofía del Derecho, en quinto curso, había cambiado un poco de opinión y fragmentos como este de Holmes me hicieron reconciliarme con él.

Eso y que el tipo tenía un aire dandy de joven (con mostacho; sin él empeora mucho) y, de viejo, una pinta de caballero sureño con venerables bigotazos que me recordaron a Twain y me hicieron cogerle más cariño.

Una de mis frases favoritas suyas es la siguiente, que creo que se aplica a todas las profesiones: "El joven conoce las reglas, pero el viejo conoce las excepciones".

themarquesito

#2 En general, diría que los jueces estadounidenses tienen bastante más libertad a la hora de redactar las sentencias, permitiéndose perlas de sarcasmo como esta de Holmes, o varias dejadas en tiempos recientes por Scalia.

PasaPollo

#3 Una breve reflexión al margen: a pesar de la fama de humoristas de los españoles, a pesar de que la obra literaria más grande de nuestra lengua sea fundamentalmente de humor paródico, a pesar de géneros como la picaresca o los sainetes, los españoles revelamos profundamente del humor y nos cuesta verlo como algo de categoría. Aquí pocos jueces se salen siquiera de un mínimo. Claro que también temen una recusación por animadversión.

El único caso que recuerdo mínimamente humorístico fue hace ya bastante: un recurso presentado por un fulano aquí en Compostela sobre una multa de aparcamiento porque la señal estaba en gallego, o algo similar, y él decía no entenderlo.

La sentencia del juez fue maravillosa:

Desestimada, y escrita íntegramente... en gallego. Y la única que había hecho hasta entonces.

Una muy sutil bofetada en la forma, más que en el fondo.

RoterHahn

A mi me ha hecho gracia este fragmento. 
el juez Oliver Wendell Holmes no encontró "ninguna razón... por la cual el hecho de que una empresa sea ilegal debería eximirla de pagar los impuestos que, si fuera legal, tendría que pagar".