Le quedaba a Lorenzo Silva (Madrid, 1966) una cuenta pendiente con Galicia como paisaje para las aventuras de sus famosos guardias civiles Rubén Bevilacqua y Virginia Chamorro. La ha saldado, ahora, 25 años y 11 novelas después de sus primeras andanzas, con ‘La llama de Focea’ (Destino), que se adentra en el Camino de Santiago que atraviesa el corazón gallego por localidades como O Cebreiro, Triacastela y Samos. Y que además da un salto temporal y espacial a la Barcelona de 1992 y la del otoño de las hogueras de 2019.
Comentarios
Porque entonces Putin no era todavía una amenaza. Ahora sí.
#1 Eso mismo se decía de los muyahidines y Bin Laden, hasta que dieron a luz a Al-Qaeda y la era del terrorismo internacional.
El sueño de la razón produce monstruos.
¿este cuñao es experto en geopolítica?
#2 Si no dice lo que quieres escuchar no es experto. Mejor escucha a Chomsky que en sus ratos libres como lingüísta sí es experto.
No quería hacer una novela sobre el 'procés', porque no sé si es demasiado tarde o demasiado pronto pero saco una novela mezclando al independentismo catalán con el Kremlin.
Ya fuera el independentismo en Cataluña o la Rusia de Putin, no se soporta todo lo que molesta. Si eres más fuerte que el otro, solo existe una cosa: aplástalo
Se le ve objetivo y sereno al zagal.
#6 Sí. Y me mantengo en que se dedica a blanquear a la GC.
Y él lleva los mismos años blanqueando a la guardia civil.
#3 te has leído sus libros?? porque en uno de ellos son policías nacionales y guardias civiles los que asesinan a un compañero además de trabajar para los narcos metiendo droga en España