...Al otro lado hubo cientos de mujeres nacionalistas que, a pesar de luchar por el bando ganador, son tal rareza histórica que a nadie —franquistas, republicanos, historiadores— le han interesado demasiado. Entre otras razones, por un papel activo que no se correspondía con la imagen que debía conservar la mujer nacional en el nuevo régimen. - Una variedad de perfiles que compartían, eso sí, un puñado de rasgos: “Su cosmovisión e imaginario cultural católico y un fuerte sentimiento antirrepublicano.
Comentarios
Amargados siempre ha habido
Anda que no quedan de esas aún.
y de que se sorprenden? La mayoría de mujeres eran ultracatolicas, y las izquierdas se opusieron al voto femenino porque sabían que las mujeres votarían en masa a la derecha, cosa que efectivamente ocurrió y en 1934 ganó la CEDA.
Lo resumió muy bien Indalecio Prieto, líder del PSOE, diciendo "dar el voto a la mujer es hacer que el párroco vote dos veces", terminando con un “Se ha dado una puñalada trapera a la República”.
instinto de supervivencia