El saqueo de Roma o saco de Roma tuvo lugar el 6 de mayo de 1527 y supuso una importante victoria del ejército imperial de Carlos V en el marco de los enfrentamientos entre su Sacro Imperio Romano Germánico y la llamada Liga de Cognac, que fue una alianza entre el Papado, Francia, Milán, Venecia y Florencia firmada el 2 de mayo de 1526 y vigente hasta 1529.
Tanto Vikingos y tanto HBO, pero de nuestros logros no hacemos series:
los cadáveres se pudrían por las calles, por lo que la peste y las enfermedades asolaban la ciudad. Las tropas imperiales abandonaron Roma por la peste, pero volvieron a tomarla y saquearla unos meses después. Hasta su salida definitiva en febrero de 1528, las tropas imperiales hicieron de Roma su burdel y su taberna. El gran número de prostitutas que había en Roma impidió que se ultrajase a más mujeres. Se perdieron las cabezas de los apóstoles San Andrés y San Juan, la lanza Santa con que se remató a Cristo, el sudario de la Verónica, la Cruz donde se supone que Cristo fue crucificado y otras reliquias. Los eclesiásticos fueron sometidos a vilipendiosas pero divertidas gracietas como el cardenal Gaetano, vestido de mozo de cuerda, que fue empujado por la ciudad a patadas y sopapos. Los soldados borrachos jugaron a la pelota con la cabeza de algún santo. Hubo iglesias arrasadas, conventos quemados y monjas violadas en masa por los lansquenetes...
Comentarios
DUPE: Saco de Roma. El día que España tomó preso al Papa
Saco de Roma. El día que España tomó preso al Papa
agosto.libertaddigital.comCreo que no soy la única por aquí que ve la serie "Carlos Rey, Emperador" todos los lunes.
Que no se quejen, si llegamos a mandar a los de Genova no hubiese quedado piedra sobre piedra...
Tanto Vikingos y tanto HBO, pero de nuestros logros no hacemos series:
los cadáveres se pudrían por las calles, por lo que la peste y las enfermedades asolaban la ciudad. Las tropas imperiales abandonaron Roma por la peste, pero volvieron a tomarla y saquearla unos meses después. Hasta su salida definitiva en febrero de 1528, las tropas imperiales hicieron de Roma su burdel y su taberna. El gran número de prostitutas que había en Roma impidió que se ultrajase a más mujeres. Se perdieron las cabezas de los apóstoles San Andrés y San Juan, la lanza Santa con que se remató a Cristo, el sudario de la Verónica, la Cruz donde se supone que Cristo fue crucificado y otras reliquias. Los eclesiásticos fueron sometidos a vilipendiosas pero divertidas gracietas como el cardenal Gaetano, vestido de mozo de cuerda, que fue empujado por la ciudad a patadas y sopapos. Los soldados borrachos jugaron a la pelota con la cabeza de algún santo. Hubo iglesias arrasadas, conventos quemados y monjas violadas en masa por los lansquenetes...
http://juanpabloarenas.blogspot.com/2008/08/el-saco-de-roma.html?m=1