Desde los veinte años hasta que ya no pudo sostener la pluma, fue anotando casi cada día experiencias y reflexiones privadas, como una forma de preservar detalles que observaba. No es un libro para leer de corrido, sino para tener en casa y volver sobre él una y otra vez, como compendio de sabiduría y antídoto contra el consumismo injustificado de la sociedad moderna. Al leerlo entendemos por qué el nombre de Thoreau se alza alto como un faro y por qué sus palabras han saltado la barrera del tiempo, haciendo de él un clásico norteamericano.
Comentarios
Las reflexiones de Bertol Brecht también están muy bien, aunque el libro no sé como se titula exactamente