En el último pleno extraordinario del Ayuntamiento de Valverde del Camino la alcaldesa del PP haciendo un autoritario uso de sus atribuciones municipales al prohibir que se grabasen imágenes de la sesión. Los argumentos que esgrimió para tan peculiar negativa fueron que los ciudadanos “pueden hacer un uso particular de dichas imágenes”.
¿Pero lo de grabar en los plenos no dijo el Tribunal supremo que sí se podía? ¿O lo dejó a discreción del cacique-alcalde de turno? Si fuera el primer caso no entiendo por qué no se empura a todos esos alcaldes por prevaricación, en el segundo no entiendo para que lo dejan a criterio de cada municipio si van a decir que no.
#3 Sí, es la terapia del miedo: trato de impedirlo y lo denuncio a sabiendas de que están en su derecho, a ver si alguno se echa para atras por no meterse en jaleos. Roza la prevaricación.
No quieren que haya pruebas de sus políticas contra el pueblo. Esto sí que son "casta", quieren sus espacios políticos endogámicos donde mangonear sin que nadie les moleste.
Comentarios
Yo obligaría también a que desconectaran los cerebros. Hay gente que recuerda cosas...
¿Pero lo de grabar en los plenos no dijo el Tribunal supremo que sí se podía? ¿O lo dejó a discreción del cacique-alcalde de turno? Si fuera el primer caso no entiendo por qué no se empura a todos esos alcaldes por prevaricación, en el segundo no entiendo para que lo dejan a criterio de cada municipio si van a decir que no.
#3 Sí, es la terapia del miedo: trato de impedirlo y lo denuncio a sabiendas de que están en su derecho, a ver si alguno se echa para atras por no meterse en jaleos. Roza la prevaricación.
No quieren que haya pruebas de sus políticas contra el pueblo. Esto sí que son "casta", quieren sus espacios políticos endogámicos donde mangonear sin que nadie les moleste.
A ver si con estas cosas hay alguien que afirme todavía que esto es una democracia sana.
No tiene mucho que ver, pero el juez Baltasar Garzón es hijo adoptivo de este pueblo, en el que comenzó su trayectoria profesional: http://www.elmundo.es/elmundo/2010/09/10/andalucia/1284103606.html