Hace 11 años | Por coxal a elboletin.com
Publicado hace 11 años por coxal a elboletin.com

Todos los hijos biológicos de Joseph Goebbels, ministro de Propaganda durante el III Reich, murieron al ingerir cápsulas de cianuro. Sin embargo, su hijastro, Harald Quandt, por aquel entonces oficial de la Luftwaffe, se encontraba aquella primavera de 1945 en un campo de prisioneros británico, por lo que no se acogió al trágico destino de su familia y sobrevivió para ver nacer a sus cuatro hijas que tienen hoy, en conjunto, una de las mayores fortunas de Alemania.

Comentarios

p

#1

Es más su relación con Goebbels es mera coincidencia (su madre se casó con él). Es absurdo relacionarlos estrechamente tal como hace #3 sin leer, tengan la relación que tengan.

El padre fue un avispado que sacó provecho de la guerra y ganó muchísimos millones. El hijo se ha limitado a mantenerlo recuperándolo después de Goebbels muerto. Eso hubiera pasado igual se casara o no la madre con Goebbels, pero #3 tiene información oculta (y una bola de cristal para ver mundos paralelos) para desmentirlo. Que el padre biológico hiciera fortuna durante la I guerra mundial y que su ya exmujer se casara con Goebbels después de la guerra (en 1932) no tiene nada que ver. Que el hijastro de Goebbels consiguiera su patrimonio después de muerte Goebbels no tiene nada que ver, desde su tumba Goebbels maquinó. O quizás #3 piensa que Goebbels sigue vivo.

A ver si tiene a bien iluminarnos.

coxal

#5 #1 Recomiendo el enlace que puse en #2

Günther y Herbert Quandt, nazi el padre y nazi el hijo, participaron desde primera fila en el esfuerzo bélico de Hitler y en el gran expolio de bienes judíos orquestado por el régimen hasta 1945. Han corrido ríos de tinta sobre la supuesta “fascinación” que los nazis ejercían sobre los alemanes, pero se habla menos de la colosal rapiña que llamaron arisierung: la apropiación de los bienes de los judíos de Alemania y los territorios ocupados. El Deutsche Bank, por poner un ejemplo ilustre, afanó la berlinesa Banca Mendelssohn. Pero también muchos pequeños tenderos se lucraban gracias al boicot a la competencia judía, lo mismo que algunos funcionarios ascendían gracias al despido de sus superiores por razones “raciales”. A principios del siglo XX había más de 600.000 judíos en Alemania. Su paulatina deshumanización legal desde 1933 y su posterior exilio o supresión biológica (asesinato y cremación) presentaron una oportunidad de medro y de lucro para millones. No solo de ideología vive el hombre.

Al teléfono desde Baviera, Scholtyseck confirma que el nazismo de Günther y Herbert Quandt fue “oportunista”. Günther decía que los nazis lo “persiguieron implacablemente”. Es cierto que pasó unas semanas en la cárcel de Moabit, víctima de una oscura intriga sin mayores consecuencias. El empresario, ya entonces muy rico, tomó buena cuenta de la arbitrariedad de la dictadura y “decidió conscientemente sacar partido de ella”. Las grandes empresas alemanas, lo mismo que el Ejército y las instituciones públicas, se convirtieron en los compinches necesarios de Hitler. Los Quandt “fueron parte del régimen”.

Así pudieron, entre otras maniobras “contrarias a la decencia”, apropiarse de las fábricas del judío Henry Pels en 1937. Durante la guerra siguieron ojo avizor sobre cualquier otra presa. La fábrica de baterías AFA (hoy Varta) de Hanóver obtuvo además su propio campo de trabajos forzados. Allí se fabricaban acumuladores eléctricos para la flota submarina y para los cohetes V-2. Günther (1881-1954) y Herbert (1910-1982) eran nazis de última hora, pero bastaba. El padre se hacía fotografiar con varias condecoraciones en la solapa: su insignia del NSDAP, la medalla al Mérito de Guerra y una que lo distinguía honoríficamente comowehrwirtschaftsführer (líder de la industria de defensa).

(...)

Benjamin Ferencz, que fue fiscal en los juicios de Núremberg, evaluó en 2007 la implicación de Günther Quandt en el entramado económico del nazismo a la luz de las nuevas investigaciones: fue “tan culpable como todos los demás”. Como Krupp, como Flick y como Thyssen. Criminales de guerra.

juvenal

Titular sensacionalista, Quandt no es descendiente de Goebbels, es mas, no creo que convivieran en la misma familia ya que la madre dio la custodia la padre cuando se divorciaron.

coxal

#9 Pues a mi lo que me parece significativo es que esa familia, sea o no directa de Goebbels fundamentó parte de su riqueza en el expolio realizado durante el nazismo. Pero eso si, el titular es muy importante, lo otro son mamadurrias...

Paisos_Catalans

Se han cuidado de decir "hijastros" en el título, para aumentar el sensacionalismo.

coliflor

¿De qué nos extrañamos? ¿Los descendientes de Franco son pobres?

coxal

Más sobre la relación de Guenther Quandt con el nazismo:

http://xaviercasals.wordpress.com/2011/10/15/el-pasado-nazi-de-bmw/

D

Y aquí los de unos señores que basaron su riqueza en la pirateria, o comerciar con Franco, como los March. ¿Somos diferentes?

Rodin

Y los de Franco, de España.

D

Errónea, no son descendientes de Goebbles.

Hale a buscar karma a otro lado.

An66

Como no podia ser de otra manera, por desgracia, 70 años despues.