(C&P): El señor Tabo vive en Japón y colecciona real dolls. Ya saben, esas mujeres casi reales que son como el Mercedes Benz de las muñecas hinchables. Tiene casi cien de ellas. Todo un harén en el que se habrá gastado unos 150.000 euros a lo largo de su vida. A este simpático ingeniero japonés nadie le contesta cuando cierra la puerta a sus espaldas y grita "cariño, ya estoy en casa", pero a él le da igual. A sus 45 años ha descubierto que el verdadero amor no depende de que la otra persona respire...
Comentarios
Este señor es un machisto... y un fistro
El artículo de Soitu será nuevo, pero el reportaje en que se basa es viejo, muy viejo.
Bueno, cada uno tiene sus aficiones... Aun así, yo prefiero el calor humano de una mujer de carne y hueso