Desde hacía meses en los mentideros político/periodísticos (sí, porque en la capital y sus alrededores todo está demasiado mezclado y agitado, gracias sobre todo a ella) de Madrid se venía especulando con la posibilidad de que Esperanza Aguirre dejara el mundo de la política por razones de salud y, sobre todo, por cuestiones relacionadas con sus encontronazos internos. Ayer saltó la noticia. La dio ella. Como le gusta; incertidumbre, sorpresa y mucha expectación. Todos los focos, micrófonos, cámaras centrados en su persona.
Comentarios
@lerense
#0 Sigue insistiendo, pero seguir mandando del mismo sitio lo seguimos considerando spam, y lo votamos como tal.
"Expectación", please.