Intento no dejarme seducir por las modas, pero el mundo de nuestras compañeras de metal no es ajeno a ellas y en estos últimos años ha irrumpido una francamente tentadora: las bicicletas fixies, una manera pija de llamar a una bicicleta de piñón fijo reducida a su mínima expresión. Porque una fixie no es mas que eso, la hermana urbana de la bicicleta de velódromo.
El fenómeno fixie es la última frikada que viene a dar la razón al gordaco del todoterreno que califica de estorbos a los ciclistas.
No se puede atender el tráfico urbano con un piñón fijo, haciendo acrobacias y derrapadas (ver video en la web). El que tenga la "necesidad" de montar un piñón fijo, por favor, que monte también un buen freno delantero. No va a restar "purismo" a su montura y ganará en seguridad para él y para todos los que le rodeamos, entre los que también estamos algunos otros ciclistas.
Comentarios
¿Retorno a los orígenes? Pues que quiten también toda la transmisión y a empujar con los pies.
Hay que joderse la cantidad de soplapolleces que hay que decir para justificar una mamarrachada.
El fenómeno fixie es la última frikada que viene a dar la razón al gordaco del todoterreno que califica de estorbos a los ciclistas.
No se puede atender el tráfico urbano con un piñón fijo, haciendo acrobacias y derrapadas (ver video en la web). El que tenga la "necesidad" de montar un piñón fijo, por favor, que monte también un buen freno delantero. No va a restar "purismo" a su montura y ganará en seguridad para él y para todos los que le rodeamos, entre los que también estamos algunos otros ciclistas.
Pero es que con freno delantero no es tan cool.