El próximo gobierno se centrará al principio en cuestiones internas. Los ultraortodoxos serán su primer objetivo. Se dedican a estudiar religión y se reproducen más rápido que el resto de israelíes, con una tasa de natalidad del 6 por ciento: su número se duplica cada quince años; la de los árabes es 2,8 por ciento. En el último gobierno ya se habló, pero Netanyahu no se atrevió a dar el paso. En esta legislatura parece inevitable.
Comentarios
A ver si hay suerte y envían a Lieberman al kibutz a plantar ajos.
#2 Lieberman no, Eli Yishai, líder del Shas. Lieberman ya tiene suficiente con lo suyo http://www.eldiario.es/politica/Lieberman-interrogado-nuevo-caso-abierto_0_83641672.html.
Cómo va a molar ver a los de las trencitas rapándose el pelo para servir en el ejército, y eso que no me gustan los ejércitos.
Idiocraciaaaaaa