Esto está digno de Crónica TV. En Argentina, un tipo asaltó y le quitó su móvil a otra persona que, intimidada, le hizo caso sin mediar resistencia alguna. Al recibir el teléfono, el ladrón lo analizó y — tras pensarlo un par de segundos — se lo devolvió pues no le gustó.
Comentarios
Si no queda satisfecho le devolvemos la condena.
Bueno, tuvo suerte de que no lo matara por esa misma razón.
Celular?
Pues anda que no está lejos dónde ha ocurrido la notiia.