Pål Enger, uno de los autores del robo de "El Grito" de Edvard Munch en 1994, ha admitido por primera vez su culpabilidad y que escondió el famoso cuadro entre los tableros de la mesa del comedor, sobre la que sus tíos y su madre comían tarta y bebían café todas las tardes.
Comentarios
#7, algo si se ha recuperado.....ya no grita, solo emite ligeras protestas
#3 Sí, efectivamente, eso es lo más llamativo de esta noticia.
Ha sido leer la noticia y poner el Grito en el cielo!!
¿Y si los tíos rompían la mesa en un arrebato de pasión? Sería el polvo más caro de la historia
#7 Te he faltado preguntar si el cuadro este era de Chillida
Una de las mesas mas caras de la historia...
Pues a mi ese cuadro me da no se que, pero me gusta.
Diossssssssss!!!!!
Para matarlo!! Ese cuadro me encanta !
De hecho lo tengo a tamaño original una replica en mi habitación. I love it!
Aish..
¿Pero se ha recuperado el cuadro?
solo comían tarta y cafe?? que dieta mas variada
"sobre la que sus tíos y su madre comían tarta y bebían café todas las tardes"
A saber cómo tendrían el colesterol y la tensión.
pues a mi me da zuztito
#8 Lástima de no tener suficiente karma, sino te votaria
y después critican al Juan Antonio Roca ese por tener un miro en el baño...
#8,
comían tarta todas las tardes???? jope, y yo que no pruebo ni un pastel el día de mi cumple por mantener la línea.
Si llega a ser el ladrón del Guernica lo pone en el tejado...